El presidente estadounidense, Donald Trump, provocó un terremoto político con un par de tuits en los que sugería a cuatro legisladoras demócratas que regresaran a sus países “rotos e infestados de criminales”, en lugar de criticar a Estados Unidos por las condiciones de reclusión de los inmigrantes ilegales en la frontera sur. Tres de las legisladoras son en realidad nacidas en el país, y sólo una nació en el extranjero. Los mensajes llevaron a varios científicos a retomar su hipótesis de que Trump podría ser “el primer ser humano que logró usar Twitter sirviéndose de su ano en lugar de su cerebro”.

El mandatario recibió innumerables cuestionamientos por sus tuits, pero, lejos de dar marcha atrás, redobló la apuesta: recomendó a “todos los inmigrantes ilegales que se vuelvan a sus países de mierda, porque planeo convertir a Estados Unidos en uno de ellos, así que ya no va a tener sentido que estén aquí”. Trump dijo estar “completamente convencido” de que va a ser reelecto para un segundo mandato en 2020, cosa que le permitirá “seguir gobernando en forma caprichosa e irresponsable y sin respeto por las instituciones, como un buen líder del Tercer Mundo”. “También planeo seguir promoviendo las desigualdades sociales, de modo que se generen niveles de violencia cada vez mayores, como pasa en El Salvador o Guatemala. Créanme: dentro de cuatro años este país va a estar tan arruinado como esos agujeros malolientes en Centroamérica o África. Mejor, váyanse”.