Jack Kirby fue uno de los creadores más importantes de la industria del cómic de superhéroes. En 1970, este cincuentón neoyorquino estaba tan cansado de cómo lo trataban en Marvel Comics que firmó un contrato para incorporarse a DC Comics, su rival de todas las horas.

La frase “Kirby is coming” comenzó a aparecer en los títulos de DC, primero en pies de página y luego en publicidades, como un mantra que anticipaba una de las movidas más fuertes en la historia del noveno arte. “Kirby is coming”.

Junto a Stan Lee, Jack había cocreado mutantes, hombres de hierro y cuartetos fantásticos. Incluso, décadas antes, había cocreado al Capitán América junto a Joe Simon. Pero nunca contó con el don del autobombo que tan bien utilizaba el “sonriente Stan”, y sentía que no se le daba el crédito suficiente. Y era cierto.

Fue así como se concretó este nuevo “pase del siglo”, en el que la figura destacada de una editorial se marcha al equipo contrario y debe ganarse a su hinchada; aunque la rivalidad entre DC y Marvel es bastante amigable. La realidad es que ambas editoriales se nutren de un número relativamente pequeño de lectores al que no quieren alienar. Sin mencionar que los talentos suelen ir de un lado al otro, firmando cada tanto algún contrato de exclusividad, fundamentalmente porque les brinda beneficios en la cobertura de salud.

En este panorama, se volvió cada vez menos común que un creador permaneciera muchos años en una sola editorial. Así que fue recién en 2017 que se anunció otro “pase del siglo”, con la llegada a DC Comics del talentoso y prolífico Brian Michael Bendis.

La vida de Brian

Hijo del cómic policial y detectivesco, Bendis comenzó a jugar con chiches ajenos en 1999. El nativo de Cleveland comandó la serie Sam and Twitch (1992), acerca de dos policías del universo de Spawn, paladín demoníaco creado por Todd McFarlane (en 1997) para Image Comics. Al año siguiente crearía, junto a Michael Avon Oeming, la historieta Powers, sobre oficiales de policía que investigan casos relacionados con superhumanos.

El año 2000 fue clave en la carrera de Bendis, ya que se editó el primer número de Ultimate Spider-Man, título que lo consagraría entre la crítica y el público. Marvel Comics, consciente de que los nuevos lectores tenían grandes inconvenientes para entender lo que estaba sucediendo con algunos de sus personajes, decidió crear el “Universo Ultimate”, que contaría historias desde cero, sin los inconvenientes de eso que se conoce como “continuidad”.

La “continuidad” no es otra cosa que la acumulación de sucesos atravesados por todos los personajes de la editorial desde que surgieron. Esa construcción de un mundo colectivo, en el que Hulk puede cruzarse por la calle con Thor, supone que la próxima vez que Hulk y Thor coincidan en una historieta no pueden actuar como si no se conocieran. ¡Hace 15 años se cruzaron por la calle!

En los primeros números de Ultimate Spider-Man, Bendis y el dibujante Mark Bagley contaron cómo el tímido nerd recibía los poderes de una araña, para luego introducir a su elenco, los principales villanos, etcétera. Quien siguiera esa historieta no tendría problema en entender lo que estaba ocurriendo, ya que no cargaba sobre sus espaldas décadas de continuidad (claro que, cinco años después, ya tenía cinco años de continuidad, pero no nos vayamos de tema).

Marvel supo aprovechar el talento de este guionista en ascenso. Además de los 111 números de Spider-Man, que superaron el récord de la editorial de Lee y Kirby en Los Cuatro Fantásticos, escribió la serie Daredevil (1998) durante cinco años y 55 números.

Además, dejó una marca imborrable con la creación (junto a Michael Gaydos) de Jessica Jones, investigadora privada que protagonizaba el cómic Alias (2001) y que años más tarde llegaría a Netflix.

Su pluma se paseó por los títulos más importantes de la editorial. En Los Vengadores incluyó por primera vez a Spider-Man y Wolverine, que hasta el momento se manejaban mejor en solitario o con los X-Men, respectivamente. También comandó varios crossovers, eventos en los que alguna amenaza obliga a unirse a medio universo para derrotarla.

En 2011, con Sara Pichelli, creó a Miles Morales, quien se convirtió en el Hombre Araña del Universo Ultimate tras la muerte de Peter Parker, y que comandó la brillante película Spider-Man: un nuevo universo (2018), donde también debió asumir un gran poder (y una gran responsabilidad) ante la desaparición del arácnido original.

Durante los últimos años de su estadía en Marvel, Bendis se encargó de los X-Men, los Guardianes de la Galaxia y Iron Man, entre otros. Hasta que en noviembre de 2017 se anunció, con bombos y platillos, que se iría al vecino de enfrente, llevándose consigo sus cómics “de autor”. Una movida que desprendió varias mandíbulas en el sereno mundillo de la historieta mainstream estadounidense.

Bendis is coming!

Emulando la frase usada para Kirby, la editorial le abrió las puertas y le permitió elegir con qué chiches del arenero quería jugar. Muchos pensaban que sería ideal para Batman, pero el guionista asumió el control de las dos series sobre el último hijo de Kriptón: Superman y Action Comics.

Bendis, que casi muere por una infección justo cuando se concretaba el pase, nunca se conformó con un par de series en sus manos. Así que lanzó dos títulos de su propiedad (Pearl, con Michael Gaydos, y Cover, con David Mack), retomó Scarlet (con Alex Maalev) y escribió una historieta de Batman que primero se comercializó en supermercados y más tarde en comiquerías.

Por último, demostrando que la apuesta de DC Comics fue fuerte, lanzó su “sello boutique” Wonder Comics, orientado a un público joven. En los últimos años la editorial permitió que autores renombrados coordinaran un puñado de títulos, como ocurrió con Gerard Way en Young Animal (2016) y con la línea de cómics de terror de Joe Hill.

En el caso de Bendis, incluye dos trabajos suyos: la historieta Young Justice sobre personajes jóvenes como Robin o Superboy, y Naomi, sobre una jovencita creada para la ocasión (ambos de 2019). Además, supervisa una serie de los Gemelos Fantásticos y otra sobre un extraño aparato que otorga poderes al azar a quien lo active.

El autor parece muy cómodo en su nuevo hogar, y la última noticia relacionada con su trabajo es la llegada de una nueva serie que escribirá, retomando a uno de los supergrupos más queridos de ese multiverso: la Legión de Superhéroes, jóvenes de diferentes planetas que combaten el mal durante mil años en el futuro. Si la salud se lo permite, los lectores de DC Comics tendrán Bendis para rato.