La alta votación que obtuvo la fórmula opositora en las elecciones internas del domingo en Argentina provocaron una suba del dólar y una baja de las acciones de las empresas argentinas que cotizan en Wall Street. El presidente Mauricio Macri consideró esto una prueba de que “el mundo no confía en el kirchnerismo”. “Si vuelven al poder van a destruir el país con irresponsabilidad. Por eso les pido a los argentinos que en octubre confíen en mi capacidad para destruir el país con seriedad”. El mandatario considera que “hay dos maneras de dejar una nación hecha trizas”. “Una es hacerlo de espaldas al mundo, de espaldas a los mercados, en definitiva, de espaldas a la realidad; eso es lo que representa el populismo kirchnerista. Nosotros, en cambio, proponemos una forma de destruir la economía y el tejido social de una manera responsable, que los mercados y el Fondo Monetario Internacional respetan y avalan. Acá lo que está en juego es la imagen internacional de la Argentina”, explicó.

Para Macri, uno de los motivos por los que los argentinos votaron a la fórmula integrada por Alberto Fernández y la ex presidenta Cristina Fernández es que “sobredimensionaron el problema del hambre”. “La gente que pasa mucho tiempo sin comer se asusta y se cree que puede llegar a morir. Pero yo les pido que me escuchen: no se van a morir. Es muy difícil, por lo menos. Tienen que aguantar un poco más sin comer, un par de años como mucho. Después vamos a volver a la senda del crecimiento y la felicidad”.