Lejos de amilanarse, el ex intendente de Artigas Pablo Caram arremetió contra la Junta de Transparencia y Ética Pública, que en un informe había cuestionado una serie de licitaciones de la comuna que fueron ganadas por empresas relacionadas con familiares suyos y de sus colaboradores. Caram ya había sido cuestionado por tener a varios familiares trabajando para la Intendencia, algo que está prohibido por la ley. “Esto no tiene nada que ver con la ética ni con la transparencia. Es un nuevo ataque contra mí y los 57 familiares míos que trabajan en la Intendencia. Me repugna tanta mezquindad”, declaró.
El ex jefe comunal dijo, de todas maneras, que los cuestionamientos dirigidos hacia él no le quitan el sueño. “Lo que me duele es que se metan con mi familia. Estoy curtido en política y aguanto las agresiones contra mi persona, pero que no se metan con mi familia”, pidió.
Caram aseguró que tanto él como su familia están pasando por momentos “muy angustiantes” como consecuencia de los “ataques permanentes” que reciben. “Antes de que empezara todo esto, los almuerzos familiares de los domingos eran una fiesta: nos juntábamos casi 100 personas y nos dedicábamos a descansar después de una semana de actividad laboral intensa, a disfrutar de lo que habíamos ganado en buena ley, y a celebrar el aporte que los Caram hacemos al departamento. Ahora el clima es otro: estamos todos amargados, porque no es justo esto que nos está pasando”.