Luján (entrenadora de pulgas): “Me pareció un desastre, sobre todo comparada con la de Alberto Fernández, que entendió la gravedad del asunto y se puso duro con las medidas de aislamiento social, o con la de Jair Bolsonaro, que le restó importancia y le pidió a la gente que siga como si nada. A lo que voy es que, más allá de las orientaciones, me hubiera gustado ver algo más radical y polémico por parte del gobierno, porque me estoy muriendo del embole. Necesito emociones fuertes”.

Martina (coreógrafa de pulgas): “Pienso que Luis Lacalle Pou está manejando la crisis con mano firme, con responsabilidad, y, sobre todo, con mucha valentía. Porque para mantener a Daniel Salinas como ministro de Salud Pública hay que tenerlos muy bien puestos. Fijate que dentro de un par de años el tipo va a ser más recordado que Carmela Hontou. Y aun así, Lacalle Pou sale con él en las conferencias de prensa. Me saco el sombrero ante tanto arrojo, y te diría que hasta me asusto un poco”.

Iris (motivadora de pulgas): “Es muy bueno lo que han hecho hasta ahora, pero me preocupa el futuro, porque cuatro de cada diez casos de coronavirus de Montevideo están en Carrasco y Pocitos. O sea que dentro de un par de meses vamos a tener a medio gobierno en cuarentena. Y si el Partido Nacional tiene que empezar a recurrir a caudillos del interior porque en Montevideo ya no le quedan dirigentes, el país se va al carajo. Antes de que llegue el invierno ya estamos de vuelta en el siglo XIX”.