La senadora del Partido Nacional Graciela Bianchi estuvo en las portadas de varios medios de comunicación a raíz de sus críticas al abogado Gustavo Salle, de quien dijo que tiene “problemas de salud mental”, y al ex presidente Tabaré Vázquez, cuya carrera política, según ella, está teniendo un “triste final”. Pero sobre la noche de ayer fue noticia por otro tema: se trenzó a golpes con un espejo y terminó con una mano lastimada. Los vecinos de la legisladora contaron que sobre las 22.00 comenzaron a sentir gritos en su casa. “Al principio pensamos que estaba discutiendo con alguien, pero después nos dimos cuenta de que solo se escuchaba su voz. Nos dio miedo de que le estuviera pasando algo malo, así que nos asomamos a la ventana, y ahí vimos que le estaba gritando a un espejo”, relató uno de los vecinos.

Otro vecino confesó haber quedado “completamente desconcertado” por el espectáculo que vio a través de la ventana. “Bianchi le empezó a gritar a su imagen reflejada y a acusarla de ridícula, trepadora y maleducada. Le recriminó haber usado trampas para burlar la Ley de Cuotas, y también intentar transmitir la idea de que en algún momento fue una figura de peso en la interna del Frente Amplio para legitimar su discurso antizquierdista. Estaba tan sacada que al final le empezó a pegar al espejo”.

La senadora nacionalista fue llevada a un hospital a curarse una lastimadura en la mano. Como parte de la recuperación deberá realizar fisioterapia y un tratamiento psicológico.