El 15 de diciembre, tras la salida de Edú Pitufo Lombardo, La Gran Muñeca tuvo que arrancar de cero a construir su espectáculo de 2025. Agustín Amuedo, que iba a cantar en la cuerda de segundos, pasó a arreglar y dirigir la murga (como ya lo ha hecho en otros carnavales), y lideró un trabajo grupal que los exigió al máximo.

Crear y ensayar prácticamente en simultáneo los 45 minutos de contenido, para los que la murga dispuso de 30 ensayos. No hubo descanso para el conjunto en esta etapa previa al inicio del carnaval, con jornadas largas (algunas de doble horario) que terminaban pasadas la una de la mañana en el club Tito Frioni.

“Lo que pasó nos fortaleció”, señaló Julio Pérez, integrante de La Gran Muñeca desde 2024, en referencia al cambio de director que sacudió al grupo. Para el histórico murguista, una de las voces más aclamadas de nuestro carnaval, ese trabajo contrarreloj que tuvo que afrontar la murga “fue como un acto de rebeldía también”, que se terminó “descargando con todo” en su actuación de la primera rueda del concurso.

“El gran mérito de este proyecto es de Agustín Amuedo. Es diferente a todos para laburar. No se tranca, es recontra exigente. Su trabajo fue descomunal”, afirmó Pérez a Carnaval del futuro, y resaltó además la llegada el último mes de Pablo Porciúncula: “También fue importante, porque aportó en la música y en la escritura”.

Tras la presentación de la murga en el Teatro de Verano, al que llegaron con 24 actuaciones en tablados, Amuedo se mostró muy emocionado: “Me animo a decir que es uno de los carnavales más importantes de mi vida. Este tiene un dejo muy especial, no me lo voy a olvidar nunca”.

El grupo de textos de la Muñeca lo encabezaron Claudio Melcon, Pablo Porciúncula y Mario Jolochín, contando con el aporte de todo el colectivo de la murga.

“Volver a las raíces” es el espectáculo que presenta el conjunto, abordando temáticas político-sociales de distinta índole. Desde una caricatura de Manini Ríos y su salida del Senado, pasando por la historia del Partido Colorado, hasta el tema de la reincidencia de las personas que salen de la cárcel.

En su repertorio la murga también da una mirada a los conflictos bélicos en diferentes partes del mundo. Un bloque de fuerte crítica que generó la reacción de una organización judía en Uruguay.