En la tarde del martes, representantes de la Asociación Laboral de Trabajadores de Calcar (Altrac) y de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) se reunieron nuevamente con la directiva de esa empresa y los delegados del gobierno en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). Al finalizar la tripartita, el dirigente de la FTIL, Enrique Méndez, dijo a la prensa que “dentro de las dificultades que se habían presentado”, valora “positivamente la reunión y el acuerdo que firmaron trabajadores y directivos de Calcar”.

Con este escenario, “que no es el que queremos”, aclaró, se ha “llegado a un acuerdo para no ingresar en una situación de conflicto en la industria láctea”.

En virtud de lo planteado por la empresa en primera instancia que era enviar 54 trabajadores al seguro de paro, “se pudo minimizar el impacto y negociar el envío de 37 compañeros”, expresó el dirigente de la FTIL.

Durante estos cuatro meses, la planta de Carmelo “no recibirá leche ni producirá quesos”, en tanto estará funcionando el sector de “maduración del producto y la logística”. En este marco, “se pudo reducir el envío a seguros de paro, que serán rotativos”, aclaró Méndez, logrando además “que cada trabajador pueda hacer uso de la mitad de su licencia”, dentro del período que comenzará este jueves.

El dirigente destacó que esta negociación “es parte de un proceso momentáneo”, y que desde la federación como desde Altrac pretenden que sea para la reapertura de la producción en Carmelo, donde “la defensa de los puestos de trabajo es fundamental”.

En el marco del acuerdo con la empresa, Méndez aseguró que “hemos colocado una serie de garantías”, donde por un lado “mencionamos la necesidad de que exista formación para los trabajadores hacia el proyecto del Fondo de Reconversión de la Industria Láctea” que la empresa va a elevar en los próximos meses.

Además, “exigimos que el proyecto sea presentado al sindicato para poder negociar y discutir sobre el mismo”, cerró Méndez.

Semanas de conflictos

Desde fines del año pasado, la empresa láctea Calcar, atraviesa un momento complicado debido a la baja de exportaciones y a una pérdida progresiva de productores remitentes que afecta la capacidad de elaboración de diversos productos.

Calcar posee dos plantas industriales en el departamento de Colonia: una en Carmelo, donde se elaboran productos para la exportación, y otra en Tarariras, dedicada a abastecer el mercado interno. En total, trabajan unas 180 personas.

En el mes de diciembre, el dirigente de la Asociación Laboral de Trabajadores de Calcar (Altrac), Luis Guigou, confirmó a la diaria que esa cooperativa atravesaba “un escenario complejo” y el sindicato avizoraba “un posible cierre de la planta de Carmelo”.

La situación originada “es muy tensa” porque “se comenta acerca de envíos al seguro de paro y del cierre parcial o total de la planta de Carmelo, pero todavía no tenemos información oficial al respecto”, había comentado el sindicalista.

En los primeros días de enero, la situación se siguió agravando. El miércoles pasado, los trabajadores de Calcar colocaron un cartel frente a la planta industrial ubicada en la entrada a Carmelo: “No al cierre de Calcar. 54 trabajadores al Seguro”.

Previo a la aparición de esa pancarta, representantes de la Asociación Laboral de Trabajadores de Calcar (Altrac) y de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) se reunieron con la directiva de esa empresa y los delegados del gobierno en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Allí la directiva de Calcar anunció la intención de enviar a más de medio centenar de empleados de la planta industrial carmelitana al seguro de paro a partir de este mes, en el marco de una severa crisis que golpea a esa empresa.

Luego del anuncio por parte de la empresa, la FTIL y Altrac han estado desarrollando reuniones y asambleas con el fin de definir la estrategia a seguir ante este difícil momento. En un plenario extraordinario desarrollado el jueves 5, la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea rechazó la decisión de la cooperativa Calcar de enviar 54 trabajadores de la planta industrial de Carmelo al seguro de paro.

A fines de diciembre “la empresa canceló instancias bipartitas diciendo que no tenía resolución de envío al seguro de paro” pero el 4 de enero “se despacha con el anuncio de los seguros” para la mayoría de los integrantes de la plantilla operativa de la planta de Carmelo, cuestionó esa federación a través de un comunicado de prensa.

Además, la FTIL reclamó “una salida negociada y en acuerdo con el sindicato de Altrac y FTIL”, y anunció que en caso “de no ser así” e “instalarse de forma unilateral los seguros” de desempleo, serán decretadas “medidas de paro y lucha a nivel nacional en toda la industria”.

El lunes, la FTIL realizó un plenario en Carmelo. Tras su finalización, los trabajadores lácteos se movilizaron por las calles de esa localidad coloniense, entregando volantes y poniendo en conocimiento a toda la ciudad carmelitana, la situación que viven en este momento.