En el marco del Día Internacional de los Museos y el mes de la Ciencia y la Tecnología, este viernes a las 16.00, en la sala multiuso de la biblioteca José Enrique Rodó de Juan Lacaze, se realizará la inauguración del Museo Arqueológico Mora, muestra que tendrá como base la donación de la colección arqueológica de René Mora (1920-1993).

El proyecto, gestionado por la biblioteca local, cuenta con la financiación del Municipio de Juan Lacaze y el trabajo en convenio con la Dirección de Innovación, Ciencia y Tecnología del Ministerio de Educación y Cultura (MEC).

Las arqueólogas Elena Vallvé y Maira Malán han trabajado a lo largo de estos años en el contenido del museo, tras un minucioso proceso de investigación y valoración. Además, cuentan con el apoyo de la Intendencia de Colonia a través del Sistema de Museos de la comuna, representados por el museólogo Andrés Leal.

René Mora

René Mora (1920-1993) fue un prolífico y destacado referente cultural en Juan Lacaze. Dibujante técnico en las industrias textil y papelera, refinado diseñador y fabricante de baldosas que adornan numerosas viviendas de la ciudad, cronista, narrador, activo miembro de la biblioteca Rodó, investigador de las actividades humanas en el pasado, fueron algunas de las tareas que desarrolló Mora a lo largo de su vida.

En una entrevista con la diaria, Malán y Vallvé recordaron que Mora fue un autodidacta de la arqueología y que realizó excavaciones en diferentes puntos del país. Uno de ellos fue la desembocadura del arroyo Sauce, al oeste de Juan Lacaze, que “es reconocido especialmente por la particularidad de la cerámica, que se hace visible durante las grandes bajantes que les siguen a eventos importantes de tormenta”.

“De allí proviene la mayoría de las campanas zoomorfas registradas hasta el momento para la costa platense, entre las cuales está la conocida como 'ñacurutú'”, así como recipientes cerámicos, con variadas formas y decoración y piezas líticas pulidas de diversos tamaños, detallan las investigadoras.

La colección de Mora cuenta con más de 27.000 piezas y “constituye una de las colecciones más importantes del país, consultada históricamente por investigadores nacionales y extranjeros en el marco de diferentes proyectos”.

Dicha colección contiene registros que se inician en 1956 y culminan en la década de 1990, en la que fallece este referente local: “Cuenta con un acervo documental asociado a los hallazgos muy poco común en colecciones pertenecientes a aficionados. Se trata de una información sumamente descriptiva, en lugar de interpretativa, como era común entre los coleccionistas de la época, y que va más allá de la mera anotación de procedencia genérica de la pieza”. Las investigadoras destacan que la “documentación incluye descripciones de procesos (de extracción de material en campo y de manipulación en “el taller”), características de la adquisición en el caso de haber sido hallada por terceros, así como croquis de estratigrafía y contexto de hallazgo, mapeo y dibujo de piezas”.

La colección Mora estuvo abierta al público hasta la década de 1990. Durante varios años Malán y Vallvé han desarrollado un puntilloso trabajo de estudio, sistematización y conservación de los materiales. Finalmente, este acervo, que estuvo durante mucho tiempo alojado en lugares adecuados para su composición, saldrá a luz y podrá ser visitado por toda la población.