¿Cómo fidelizar a un cliente de un servicio de streaming? Seguramente no sea con una atención personalizada al llamar al teléfono de reclamos, o con una buena impresión de la revistita que trae los horarios. En una era en la que la gallina de los huevos de oro de Netflix se ve amenazada por otras aves de corral que ponen huevos de materiales valiosos, es necesario renovar y ampliar la oferta.

Con la llegada de noviembre, en el servicio comenzaron a desembarcar muchas más horas de programación original y licenciada. A la cabeza llega la serie que permitió que la empresa se colara por primera vez en las ceremonias de premios y les diera el primer susto a las cadenas y canales de cable. Desde el 2 de este mes está disponible la sexta y última temporada de House of Cards, drama que tomaba una historia de intriga política en el gobierno de Reino Unido y la trasladaba a Estados Unidos. Allí fuimos testigos del ascenso y los tropiezos (nunca caídas, y eso lo sintió la serie) del matrimonio Underwood. Frank (Kevin Spacey) es un personaje clave del Partido Demócrata que en el primer episodio es dejado de lado para el puesto de secretario de Estado y a partir de ese momento comienza su lenta, metódica e infalible venganza.

El único enemigo fue su propio intérprete, ya que las graves acusaciones en contra de Spacey hicieron que su personaje fuera removido al mejor estilo de Poochie de Los Simpson. Por suerte para los seguidores, Claire Underwood (Robin Wright) era un personaje fuerte que no parece tener problemas en heredar el protagonismo.

Para el 9 está prevista la llegada de Legítimo rey, película del director David Mackenzie, el mismo de la nominada al Oscar Sin nada que perder (2016). Aquí Chris Pine interpreta a Roberto I de Escocia, quien en el siglo XIV reclama el trono y lidera una feroz rebelión en contra del dominio inglés. Se trata de una producción original que tuvo su estreno en el Festival Internacional de Cine de Toronto.

Una semana más tarde, el 16, llegará el spin-off de la popular Narcos, serie acerca del enfrentamiento entre la DEA (la Administración para el Control de Drogas estadounidense) y Pablo Escobar (primero) y el cártel de Cali (después). Narcos: México fue pensada originalmente como la cuarta temporada, pero luego se optó por presentarla como un producto independiente.

Diego Luna es Félix el Padrino Gallardo, quien en la década de 1980 unió a los narcotraficantes y comandó el famoso cártel de Guadalajara. Del otro lado estará el agente de la DEA Kiki Camarena (Michael Peña), recién llegado de California. Y hasta acá lo más destacado.

Entre las temporadas “ajenas” que se anuncian está la quinta de Marvel: Agents of S.H.I.E.L.D., cuyos primeros episodios fueron tan trabajosos de ver como S.H.I.E.L.D. es trabajoso de tipear. Esos episodios están disponibles desde el 1º de noviembre. Y desde el 3 se puede ver la película de horror The Darkness (2016), con Kevin Bacon a la cabeza y una recepción bastante fría de los críticos.

John Leguizamo y la historia latina para idiotas llegó ayer y promete básicamente lo que su nombre indica: un one man show protagonizado por el actor, quien declaró públicamente que antes de cada presentación de su monólogo releía capítulos de Las venas abiertas de América Latina (1971).

El viernes llega una serie animada brasileña llamada Super drags, que el año pasado generó controversia en el país vecino y los productores tuvieron que aclarar que no se dirigía a un público menor de edad (cuando una comisión de cristianos la acusó de impulsar una “agenda LGBT políticamente correcta”). Ese mismo día se suma la segunda temporada de The Sinner, que en inglés definen como “anthology crime drama mystery”. Cuantas más palabras de estas cuatro llamen tu atención, más chances de que la disfrutes.

El 9 también se podrá disfrutar de Westside, que trata sobre nueve músicos talentosos que tendrán la oportunidad de sus vidas y nosotros descubriremos si estarán a la altura del desafío o se quedarán en el camino. También se estrenará ese día La reina del flow, telenovela colombiana en la que una joven cantante es encarcelada por un crimen que no cometió y, a su regreso, quiere venganza.

Sigue la agenda

Pasando al 16 de noviembre, Vai Anitta es una serie documental acerca de la cantante brasileña Anitta, que a los 25 años se volvió una estrella pop gracias a canciones que (creo) jamás escuché en mi vida. Otro estreno es She-Ra y las princesas del poder, animación en la que la recordada hermana melliza de He-Man tendrá una nueva oportunidad de brillar. Los rincones más recalcitrantes de internet se quejaron de la serie antes de verla, así que seguro es interesante.

El último estreno del 16 también es destacable: la película original de Netflix La balada de Buster Scruggs es un western escrito y dirigido por Ethan y Joel Coen, protagonizado por Tim Blake Nelson, Liam Neeson, James Franco y Tom Waits. Para alquilar sofás.

Al día siguiente, se suman al catálogo La maldición (2004, con Sarah Michelle Gellar) y Tortugas Ninja 2: fuera de las sombras (2016). No todos pueden ser goles. Si sobreviven hasta el 19 podrán ver La vida acuática con Steve Zissou, uno de los buenos films de Wes Anderson, con Bill Murray como el Jacques Cousteau hipster.

La serie de comida Todo el mundo a la mesa llegará el 20 de noviembre con 12 equipos de dos chefs que elaborarán platillos tradicionales de diferentes países. De ahí lo de “todo el mundo”. Esperen un jurado malo, uno peor y otro insoportable.

Crónicas de Navidad es otra película original, que llega bastante antes del 25 de diciembre, aunque mucho después de las decoraciones de los shoppings: el 22 podremos ver a Kurt Russell interpretando a Papá Noel con dos niños que se cuelan en su trineo y le complican la noche.

Para el 26 está prevista la película El rascacielos, pero no la de La Roca sino una con Tom Hiddleston, de 2015. Se suma Flubber y el profesor chiflado, la comedia de 1997 con Robin Williams a la cabeza.

Por último, el 30 desembarcará la quinta temporada de Vikingos, también Nicky Jam: el ganador, sobre el astro del reggaetón que seguramente escuché en alguna radio ajena (no escucho mucha música) y Un príncipe de Navidad: la boda real, en una demostración de que el verdadero mes de la Navidad es noviembre. Para diciembre esperen la llegada de películas sobre la Pascua y la independencia de Estados Unidos.