Este lunes falleció el doctor Carlos Engelman, creador de una de las principales colecciones de arte de nuestro país. El neurofisiólogo y su esposa, Clara Ost, montaron la afamada colección y sala de exhibición Engelman Ost, dedicada al arte contemporáneo uruguayo, en el centro de Montevideo.

El Instituto Nacional de Artes Visuales destacó el legado que deja su “original y exquisita colección”, compuesta por cientos de obras de más de 80 artistas, que ellos consideraban representativas. También destacaron su gesto de generosidad, ya que ambos definieron que su acervo tenga acceso libre y gratuito.

Engelman y Ost no compraban en galerías ni en remates, según consigna un artículo de Carolina Porley en Cuadernos del CLAEH, sino que se vinculaban directamente con los artistas y en ocasiones forjaban relaciones de amistad. “Con Carlos nos hacíamos amigos del artista. No nos propusimos ser coleccionistas”, contaba Ost en 2013.

“Fue una cosa que nos fue resultando natural: nos gustaba la obra, nos interesaba seguir dialogando con el artista. Tratábamos de averiguar por qué a veces el artista se anticipa con su propuesta a algo que está en el aire; lo vislumbra y lo expresa a través del soporte que elige. La idea siempre fue seguir las trayectorias. Nos gusta saber en qué etapa están, que nos muestren cómo van cambiando, compremos o no”.

Compraron su primera obra, una estatua de María Freire, en 1963. Las adquisiciones aumentaron en los setenta y especialmente en los ochenta, cuando “los artistas no tenían dónde mostrar lo que hacían, dónde exponer”.

Así sumarían trabajos de creadores como Hugo Nantes, Hugo Longa, Juan Burgos, Carlos Seveso, Margaret Whyte, Carlos Barea, José Pedro Costigliolo, Fernando López Lage, Gustavo Tabares, Virginia Patrone, Eduardo Cardozo y Lacy Duarte.