La Intendencia de Montevideo presentó una serie de medidas que buscarán impulsar la reactivación económica del sector cultural, mediante exoneraciones impositivas y reducción de costos. Estas entrarán en vigencia una vez que el Poder Ejecutivo habilite los espectáculos públicos y se mantendrán hasta 2022 inclusive.

Entre las principales medidas se incluye la exoneración del impuesto a espectáculos públicos en las primeras 800 entradas vendidas por show. A los que vendan más de ese número se les deducirá un monto sobre el que corresponda calcular el impuesto.

Además, se creará la figura del Artista Mercosur, para quienes provengan de Argentina, Brasil, Paraguay y Chile, que contará con una reducción en los impuestos de sus espectáculos. Al resto de los artistas internacionales se les baja el impuesto de 9,09% del valor de la entrada a 7,41%.

La intendencia renunciará al derecho de porcentaje de las 60 entradas que recibe mientras se aplique el aforo de 30%, que quedarán a favor de la organización de los eventos y podrán ser vendidas. Sólo se solicitarán 18 entradas de esas 60 para ser utilizadas en el marco del trabajo social del Plan de Apoyo Básico a la Ciudadanía (ABC).

Uruguay es Música (UEM), la organización civil que nuclea a productores, representantes de artistas, promotores y gestores culturales, propuso que la producción de los eventos otorgue 50% de las localidades remanentes para destinatarios de sus políticas sociales, 48 horas antes de la fecha del evento. Esto fue acordado y se pondrá en práctica.

También se disminuirá el monto a abonar por depósito de garantía, de 350 a 100 UR, y se prevé la digitalización de los trámites relacionados, para facilitar la tarea. El pago se podrá hacer en dos o tres cuotas.

Por último, en lo relacionado a las salas municipales, la intendencia evaluará la posibilidad de generar bonificaciones para su uso mientras continúe el aforo limitado, que se analizarán caso a caso.

A la mesa

UEM estuvo presente en la reunión virtual en la que se presentaron las medidas, y forma parte de una mesa de trabajo que se reúne quincenalmente con la Intendencia de Montevideo.

“En muy corto plazo, en los últimos dos meses, nos ha dado un resultado muy positivo, porque las medidas reflejan el trabajo que se está haciendo”, dijo a la diaria Leandro Quiroga Ferreres, integrante de la comisión directiva de UEM. “Pueden ser no sólo paliativas a la coyuntura, sino a la problemática del sector previo a la pandemia”.

En febrero, esta organización difundió una carta pública dirigida a la intendenta Carolina Cosse que planteaba temas “a resolver en forma inmediata”, que derivó en la creación de la mencionada mesa.

Para Quiroga y para UEM, la falta de soluciones “no era una cuestión de no querer acompañar determinadas políticas necesarias para el sector, sino que respondía a un desconocimiento del detalle de esa problemática desde la óptica del productor”, agregó. “Es fundamental el entendimiento de que las problemáticas se tienen que trabajar con los protagonistas”.

“La mesa continúa y hay muchísimo más para trabajar, en lo coyuntural y en lo estructural general. En Uruguay en general se necesita una reflexión y una profundización, para poner a la cultura y al trabajador de la cultura en un lugar diferente del que está”.

Con respecto al Poder Ejecutivo, que continúa sin reactivar a los espectáculos en vivo, repitió el concepto de “desconocimiento” de la actividad y la necesidad de trabajar, en este con el gobierno nacional. “El sector está parado, cuando si estuviéramos en una mesa de trabajo conjunta debería estar reactivado. Ahora se reactivan muchas actividades, y está buenísimo que lo hagan, protocolizadas y cuidadas. ¿Por qué nuestro sector, que protocolizó de manera impecable todos estos meses, no está abriendo?”.

“Esa reflexión es muy fuerte, porque tiene que ver con la valoración, con la dimensión de industria y con el costo de mantenernos parados”, dijo.

La realidad en Maldonado

Quiroga es propietario de la sala Medio y Medio en Punta Ballena, Maldonado. “En Maldonado, la parte impositiva relacionada con los espectáculos tiene un tipo de atención y de flexibilidad históricas. Algunos temas que se están resolviendo en Montevideo no son problemática en nuestro departamento”, dijo.

Durante la pandemia también hubo diferencias. “Hubo un tratamiento particular que permitió, incluso en el momento más duro del verano, que una gran cantidad de artistas siguiera trabajando. Maldonado fue el único departamento que mantuvo este trabajo en un formato particular: el de la música en vivo en locales gastronómicos que tuvieran habilitaciones previas al 16 de diciembre. Eso permitió que una gran cantidad de artistas pudiera tener aunque fuera un ingreso mínimo que les permitiera sustentarse”.

“Yo fui el encargado de juntarme con el propio intendente y con los involucrados en la aplicación de protocolos que el gobierno nacional dejaba en manos de cada departamento. Y entendieron que en aquel local gastronómico en donde el público ya estaba sentado en las mesas, que hubiera música o que no la hubiera sólo cambiaba que hubiera un chico o una chica trabajando en uno de los sectores, generando un ingreso y dando al comensal un poco de mejor contexto para comer. Estaba dándole más vida y la posibilidad de juntarse con la cultura sin poner en riesgo la actividad”.

Dijo que este asunto “no está en las temáticas centrales de lo hablado” en la mesa de trabajo en Montevideo, y agregó: “También entiendo que la realidad sanitaria de cada departamento es diferente”.