Un golazo de Jemina Rolfo bastó para que las carboneras se llevaran un enorme triunfo en el Parque Alfredo Víctor Viera. En el mejor momento de Colón –porque Peñarol comenzaba a acomodarse con una jugadora de menos en el inicio del segundo tiempo– apareció una pincelada de Rolfo que fue determinante para que las aurinegras vayan con tres puntos al partido decisivo. El gol fue tremendo, es cierto, pero el pase de Ximena Velazco fue fundamental. La volante se tomó un segundo, vio cómo su compañera picaba y la habilitó con un certero pase para dejarla en posición de gol. Rolfo hizo todo bien: controló, se orientó y sacó un precioso remate, cruzado por arriba, que fue inatajable para Romina Chappe. El gol cayó feo en Colón, que venía haciendo un gran partido y no supo cómo acomodarse y aprovechar la jugadora de más que tuvo en la cancha.
De arranque el partido fue todo para las de San Martín. El equipo de Alfredo Larrica se paró con un 4-3-1-2 y tuvo en Belén Aquino una figura desnivelante que fue incontrolable para sus rivales. La delantera mundialista arrancó por la derecha, tuvo algún remate peligroso y luego pasó a la banda izquierda, donde una acción suya fue decisiva. En una contra rápida, la lateral Alexia da Silva tuvo que bajarla porque se le iba. Nadia Fuques no dudó y le mostró la segunda amarilla.
Peñarol cerró bien los espacios que quedaron. Pasó de un 4-2-3-1 a un 4-4-1 que estuvo difícil de entrar. Las de Daniel Pérez se cerraron bien, mantuvieron el orden y estuvieron atentas a la contra para salir como estampida. Colón fue sumando jugadoras en ofensiva, con los tres cambios hechos, y empezó a dejar espacios en el fondo que su rival podía haber aprovechado para liquidar. Peñarol tuvo un solo cambio con el ingreso de Camila López, que fue fundamental en la marca para colaborar con sus compañeras. En la hora la tuvo Romina Chanes, de las tricolores, pero su remate dio en el travesaño y con eso se fue la esperanza para Colón. Ahora se verán las caras el domingo, con ventaja para las carboneras.
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