La superioridad de Aguada fue in crescendo. Ya fuera a nivel colectivo o individual. Lo cierto es que el rojiverde venció con un contundente 79 a 61 a Nacional e igualó 1 a 1 la serie semifinal por la Liga Uruguaya de Básquetbol (LUB). Si bien habría que destacar varios jugadores del ganador, el mejor hombre aguatero fue el extranjero Andrew Feeley, quien puso 21 puntos, dio 4 asistencias, bajó 6 rebotes y metió un tapón. En el perdedor el más destacado fue Antonhy Danridge con 16 tantos.

El primer cuarto se lo llevó Aguada 18-15. Hizo méritos y estuvo bien. Explotó mejor el juego interior y con eso consiguió dos cosas: puntos propios y faltas rivales. Tanto Jeremis Smith y Feeley fueron muy eficientes ahí abajo. Además, en la parte defensiva, el aguatero no dejó correr la cancha a Nacional y eso le quitó buena parte del juego efectivo a los tricolores, que tampoco pasaron bien la pelota ni diversificaron los ataques. Recién sobre el final Nacional se puso a tiro y descontó en la pizarra.

El trámite siguió con similares características en el segundo cuarto. Nacional no se encontraba, le costaba cada ofensiva, extrañaba los porcentajes de la primera semifinal y Aguada hizo lo suyo. No le costó mucho sacar diez puntos de diferencia (27-17, situación que se repitió 37-27 y 39-29) y, tras eso, jugó con mayor soltura. Y -no es por repetir nombres- Smith continuó siendo pieza clave abajo de los tableros. Con eso, 40-33 para Aguada.

El punto de inflexión del partido fue con el 52-37 a favor de los aguateros. No por la distancia, porque quince puntos no son muchos y menos si quedaba gran parte del tercer cuarto más todo el último por jugarse, sino porque funcionamiento contra funcionamiento la superioridad era indescontable: perímetro, juego interior, defensa; siempre mejor Aguada. Ahí ganó.

Serie uno a uno y volver a empezar. Cada partido tendrá su historia y acá, lo único que importa, quien gane dos más se meterá en las finales de la LUB.