En el Parque Batlle, Torque y Defensor Sporting cerraron fecha en el Centenario. Fue con empate 0-0. Un punto que suma para Torque –aunque sigue último en el descenso–, pero que significa un retroceso para Defensor, que en sólo tres partidos ya perdió cinco unidades y quedó posicionado en la mitad de la tabla. Además, la viola quedó en el quinto lugar de la Tabla Anual y tiene varios equipos atrás que le pisan los talones. Todo esto hay que contextualizarlo. Defensor no viene jugando bien, es verdad, pero también lo es que en todas las temporadas pierde muchos jugadores importantísimos para el esquema del equipo, y así y todo da pelea.

Fue Darío Pereira quien tuvo el avance más peligroso en los primeros minutos del partido. Tímido, muy tímido el arranque de la noche en el estadio Centenario, que recordó a las viejas épocas de dobles jornadas liguilleras de verano, pero en invierno. Poco público en las tribunas –era esperable– y menos fútbol en la cancha entre celestes y violetas. Los intentos de Torque venían por el lado de Pereira, pero cada vez que los de Pablo Marini intentaban avanzar eran bien neutralizados por los defensas violetas. Lo destacable por el lado de los tuertos en la primera media hora de juego fue el rendimiento de Pablo López, con mucha movilidad en todo el frente de ataque. El isabelino fue bien acompañado por Martín Correa, que caía por el sector izquierdo del ataque de Defensor. Una cosa era arriba y otra atrás, porque los dirigidos por Eduardo Acevedo aparecieron muy desordenados y con algunos errores de precisión que generaban pelotazos por las bandas que casi siempre iban a parar afuera. Torque atacaba, pero en la puerta del área no era claro, y atinó a pegar desde lejos, como hizo Yonatthan Rak, que sacó un zapatazo para que el mercedario Guillermo Reyes volara y la mandara al córner. Esa sí fue clara, como la que volvió a tener Rak después, con otro remate desde lejos. Pasaron los 30 minutos y pareció haberse acomodado el partido, porque Defensor respondió con dos clarísimas. Primero el argentino Germán Rivero pateó de afuera del área y Cristopher Fiermarín casi se mandó un blooper, porque la pelota pasó entre sus manos, pero lo salvó el travesaño. Luego, Pablo López apiló jugadores; tenía a su lado sólo a Rivero, pero decidió jugarse la personal, remató y rebotó en un jugador de Torque. Fueron buenas posibilidades en el cierre del primer tiempo, que terminó 0-0.

Una nueva noche fría

Los buenos momentos finales de la primera parte no se trasladaron a los segundos 45 minutos. Fue flojo el partido en líneas generales y, entre quites, despejes y faltas, se fue terminando la gélida noche. Como en los primeros minutos, Pereira siguió intentando, pero en el recuerdo quedarán las de Rak y la de River, ambas en la primera parte. Defensor terminó el partido con diez futbolistas por la expulsión de Ernesto Goñi.