Si bien ni la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), ni la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), ni mucho menos aún los organizadores del encuentro se han manifestado anunciando una suspensión del partido, se entiende que por la situación bélica que está viviendo Israel en estas horas, está en cuestión el encuentro amistoso que el lunes de 18 de noviembre deben disputar en Tel Aviv las selecciones de Uruguay y Argentina en el marco de las fechas FIFA.

El presidente de la AUF manifestó en Sport 890 que “todavía los elementos son insuficientes para aventurar cualquier tipo de cambio” y agregó que “hemos conversado con gente de nuestra delegación, con gente de seguridad de la AFA y de Israel, pero fundamentalmente con la embajada de Uruguay en Tel-Aviv. Todavía los elementos son insuficientes para poder aventurar cualquier tipo de cambio. En esa zona del mundo las cosas cambian rápidamente, y en este momento la información no es suficiente”.

En la AFA aseguran que las autoridades de Tel Aviv y los organismos de seguridad les dieron garantías suficientes como para pensar que el partido sigue firme y se jugará. El año pasado, Argentina pasó por un momento de alta tensión que llevó a la suspensión de su partido en Israel, antes de viajar a Rusia para el Mundial, cuando hubo protestas con banderas y camisetas de la selección ensangrentadas, la mayoría con el nombre de Lionel Messi, que coronaron una serie de instancias que apuntaban a lo no presentación de Argentina en Israel.

Inamistoso

Las razones que ponen en duda el partido se centran en la seguridad, dado que este martes volvió a manifestarse una fuerte acción bélica y criminal, y por más que lamentablemente la población está acostumbrada a vivir en guerra, se generan dudas en relación a la disputa del partido, que además no involucra a los locales dentro de la cancha aunque si en las tribunas del estadio Bloomfield de Tel Aviv, cuyas tribunas estarán completas, ya que los rioplatenses que viven en Israel y los israelíes ya han agotado las entradas para el partido del lunes.

La tensión bélica en la región se acrecentó cuando, en una nueva acción institucional del estado de Israel, mataron en Gaza a un líder del brazo armado de la Yihad Islámica en una de esas acciones que brutalmente se definen con el eufemismo de “bombardeo selectivo”. Bahaa al Ata, líder del brazo armado Batallones de Al Quds de la Jihad Islámica, fue el asesinado, y también su esposa. El Ministerio de Sanidad informó de la muerte de estas dos personas además de varios heridos.

Tras ese crimen y una acción similar en la ciudad de Damasco, aprobados por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el titular de Defensa, Naftalí Benet, hubo una contraofensiva y según Israel se logró interceptar decenas de cohetes de los disparados desde la franja de Gaza.

El lanzamiento de cerca de 200 proyectiles desde Gaza contra poblaciones israelíes activó las alarmas antibombardeo en ciudades próximas a Gaza –como Sderot, Ashdod y Ashkelon–, así como en Tel Aviv, sede del partido del lunes entre uruguayos y argentinos, y la zona central del país.

Los acontecimientos a la vista

El presidente de la AUF, Ignacio Alonso, ante la consulta de los periodistas del programa Último al arco, explicitó: “Desde el resto del mundo se ven las cosas con otra magnitud, y las noticias hacen que los jugadores, sus familias y nuestra institución estén en un estado de alerta superior a los habitantes del lugar, que toman esto con más costumbre. Todos sabemos el contexto de esa zona y que estas cosas del mundo suceden coexistiendo con la vida diaria normal de los ciudadanos de Israel y Palestina. Hoy no hay ningún tipo de elemento que nos permita decir que la situación va a cambiar en cuanto a la fijación del partido. Los elementos tienen que estar en las próximas horas, con más acontecimientos a la vista”.

De todas maneras, hay una variable no explicitada por Alonso, y es el anuncio de que el Ejército israelí se prepara para responder a una oleada de ataques durante varios días.

Hay una tercera selección involucrada, la de Polonia, que en el marco de las eliminatorias de la Eurocopa debe jugar en estado israelí el próximo sábado. El partido entre israelíes y polacos está programado para jugarse en Jerusalén, a diferencia del clásico rioplatense, que se deberá disputar en el estadio Bloomfield de Tel Aviv. Tampoco en este caso la UEFA se ha manifestado acerca de un posible cambio de escenario para ese partido, y por ahora garantiza el desarrollo del juego. En este caso sólo la UEFA o el anfitrión tienen las potestades para suspender, postergar o cambiar el lugar del partido.

El encuentro entre Uruguay y Argentina, el clásico entre naciones independientes más antiguo del mundo, se jugará por primera vez en Oriente, y entonces es la primera vez que se encuentran en territorio asiático. Los contrincantes, que tienen en su historial 189 partidos amistosos, han tenido decenas de encuentros amistosos; sin embargo, el último que disputaron sin tener puntos en juego por algún campeonato o clasificatoria fue en Florencia, Italia, el 20 de agosto de 2003.

Hace más de 16 años que no juegan un amistoso, y este justamente se pone en duda por el belicismo.