Peñarol y Progreso empataron 0-0 en el Parque Capurro, en un partido jugado bajo mucha lluvia, como la tensión que precedió el juego por saber si se jugaba la fecha o no y cuál era el puntaje de dos de los perseguidores de los aurinegros, Cerro Largo y Nacional, que desde la primera fecha tienen puntos en cuestión. Fue el tercer empate consecutivo de los líderes del Clausura y de la Anual, que ahora quedan a la espera de los partidos de sus escoltas y del fallo de los puntos reclamados para saber cómo encaran la última fecha, en la que todo se definirá.

Para Progreso, la situación de indefinición es la misma, pero poniendo énfasis en las posiciones del descenso ante Boston River y Sud América.

Las reglas del juego

Parece lógico, natural y necesario que en una competencia de todos contra todos, reglada institucionalmente y reglada en su desarrollo, se aspire a la igualdad de cada una de las acciones y procederes que corresponda arbitrar, tanto dentro como fuera del partido.

Esa es la idea de competencia que felizmente hemos solidificado en más de un siglo de campeonatos. Lo que es raro es hacer foco en una irregularidad manifiesta –la de que se esté por definir un campeonato sin saber cuántos puntos tienen los contendientes por los primeros puestos- y no atender a lo que aparentemente de manera arreglada y acordada se ha hecho durante toda la temporada 2021: jugar algunos partidos con las reglas ejecutadas tan sólo por el saber entender de la cuarteta arbitral, sin posibilidad de volver atrás después de seguido el juego, y otros con la sofisticada asistencia de equipos tecnológicos que permiten revisar jugadas, corregir errores o fallos inadvertidos, cobrar o desestimar penales, revisar conductas que pueden concluir en una expulsión.

Eso también está rotundamente mal y ayer lo pudieron haber sufrido los dos, tanto como la ausencia de una resolución sobre un fallo.

Juego, viento, lluvia y otros asuntos

Hace varios meses ya -desde que Mauricio Larriera logró vehiculizar sus ideas y sus propuestas en la cancha para este plantel de Peñarol, desde que sus jugadores abrazaron y ejecutaron la idea grande, global, desde que partido a partido se repitieron nueve, diez y hasta 11 nombres en la oncena carbonera- que este Peñarol del último semestre tiene una característica que se puede valorar como muy buena, de salir en cada uno de sus partidos a proponer con mucha dinámica, velocidad, y a veces técnica, el juego en campo contrario.

Abriendo la cancha, desdoblándose por los laterales, con Walter Gargano abriendo puertas de pasillos centrales, casi siempre arremete, encierra y a veces somete al rival de turno. Eso también pasó ayer en el Capurro, donde sobre todo con el dinámico Agustín Canobbio por derecha parecía que los de Larriera golpearían y desarmarían los vanos intentos -al principio- de neutralización al rival.

Sin el Canario Álvarez Martínez, suspendido por cinco amarillas, Peñarol tiene y tuvo en Capurro en Rubén Bentancourt un gran recambio. Tiene otro tipo de juego que el de San Bautista, pero se acopla y se asocia bien a la generación ofensiva de Canobbio, de Facundo Torres y Pablo Cepellini.

Con el viento a favor, los de Progreso limpiaban nomás, y Peñarol volvía una y otra vez con un frenesí que por momentos parecía superar cualquier intento defensivo.

A los 34 minutos Giovanni González se fue profundo por derecha, terminó el camino de la línea lateral y dobló hacia el arco con intenciones de generar o un pase de gol o definirlo. Finalmente, y sorprendiendo, remató directo al arco y la pelota terminó dando en el caño en la jugada más clara hasta ese momento.

Hubo otra, no tan clara ni de gol, pero con resultados dolorosos: Elizalde, sustituto del suspendido Gary Kagelmacher, saltó con falta sobre Gastón Colman y al caer sobre la pierna del delantero gaucho sus tapones metálicos lastimaron la pierna del tacuaremboense. Falta común, sin amonestación, resolvió el árbitro, pero en el campeonato de los partidos con VAR lo hubiesen llamado para que la revisara.

Alex Silva, de Progreso, y Nicolás Rossi,  de Peñarol, este 25 de noviembre, en el Parque Capurro.

Alex Silva, de Progreso, y Nicolás Rossi, de Peñarol, este 25 de noviembre, en el Parque Capurro.

Foto: Alessandro Maradei

Siga, siga

En el segundo tiempo se repitió la acción ofensiva inicial de Peñarol y esta vez Agustín Canobbio estuvo cerca de ser el primero en mandar la pelota al fondo de las redes.

Por un par de veces estuvo muy cerca de anotar el exfutbolista de Fénix jugando en la cancha que tantas veces lo vio brillar. Especialmente cuando a los 18 minutos Elizalde habilitó de calidad a Valentín Rodríguez por la punta izquierda, este desbordó, mandó un centro que bajó Paco Rodríguez para que Canobbio rematara desde el área chica por encima del travesaño.

A los 27 minutos fue Ignacio Laquintana, quién ingresó en el segundo tiempo, el que tuvo la apertura del marcador. La hizo muy bien el sanducero que jugaba en Defensor, y tras meterse al área sacó un derechazo cruzado con mucha potencia que Rodrigo Formento, en maravillosa estirada, mandó al córner.

Ya llegando al final, nuevamente Ignacio Laquintana tuvo la oportunidad de abrir el marcador cuando una pelota larga se metió entre los centrales, el sanducero quiso definir por encima de Formento y la pelota se fue alta al techo del arco.

Después vendrían cosas mucho más dolorosas que un fallo o un penal no cobrado, como cuando Valentín Rodríguez sufrió una muy fea lesión al ser chocado de manera vehemente por su compañero Damián Musto, quien se tiró con las dos piernas para tratar de quitarle la pelota al rival y terminó con una fractura desplazada de rótula del joven y habilidoso zurdo que en la jornada del viernes tendrá una intervención quirúrgica.

El empate deja a Peñarol –si Nacional suma hoy cinco puntos, dos del fallo y tres del encuentro ante Liverpool- en condiciones de ser igualado por los tricolores en el Clausura y superado en la Anual, en un escenario poco probable apenas una semana atrás.

La misma situación de incertidumbre es la que vivirá Progreso, aunque sin esperar fallo alguno, porque Boston River lo puede pasar en la tabla del descenso si el martes, el día que termina esta desarticulada fecha, le ganara a Fénix.

La fecha 14

Este viernes, Sud América recibe a Rentistas desde las 09.45, Liverpool recibe a Nacional a las 16.30 y Plaza será local de Wanderers a las 19.00

La fecha se completa entre lunes con Cerro Largo - Torque (16.30) y martes cuando jueguen River - Villa Española (09.45) y Fénix - Boston River (16.30).

En el Clausura, Peñarol tiene 29, Cerro Largo y Progreso 25 y Nacional 24. En la Anual, Peñarol lidera con 57, mientras que Nacional y Plaza tienen 53.

Para este viernes se espera el fallo del partido Nacional - Cerro Largo, que fue empate pero que podría modificarse a victoria tricolor si el reclamo prospera, con sus consecuencias en ambas tablas de posiciones.