Ya nada queda de aquella Copa Intercontinental, Japón es apenas un punto en el mapa. Sólo, tal vez, queda el recuerdo romántico de algo que unía en una final al mejor de Sudamérica con el mejor de Europa. Ahora se llama Mundial de Clubes y reúne a los campeones de todos los continentes, algo que parece más democrático o menos elitista que aquellos mano a mano. Aunque, por la vía de los hechos, también es necesario decirlo, la nueva copa por lo general la definen europeos y sudamericanos. Son excepciones las veces que un equipo de otro continente se metió en la discusión.

Real Madrid, como campeón de la Champions League, y Flamengo, ganador de la Copa Libertadores de América, son los grandes favoritos para quedarse con la copa. Además jugarán el Mundial Seattle Sounders, campeón de la Concacaf, el Wydad marroquí, que es el actual monarca africano, el Al Ahly de Egipto, vicecampeón de África -clasifica porque la sede es en su continente-, el Al-Hilal de Arabia Saudita, campeón de la Liga de Campeones asiática, y el Auckland, ganador del torneo de clubes de Oceanía.

Cómo se juega

El partido de hoy será entre Al-Ahly y Auckland City, a las 16.00 de nuestros relojes (transmisión de DirecTV). Los africanos son uno de los máximos ganadores en el mundo del fútbol -tienen 28 títulos en su continente- aunque eso no es suficiente cuando tienen que enfrentarse con rivales de otros lares. Al-Ahly fue dirigido por un uruguayo, Martín Lasarte, con quien obtuvo el título en la temporada 2018-2019.

Quien gane esta llave jugará la segunda ronda ante Seattle. En los estadounidenses aparece el primer uruguayo: Nicolás Lodeiro, figura y líder del equipo, con quien ha ganado dos Major League Soccer (2016 y 2019) y una Liga de Campeones de la Concacaf (2022, precisamente la que lo trajo hasta aquí).

En el otro juego de segunda ronda el sorteo previo arrojó que serán rivales Al Hilal -alguna vez dirigido por Omar Borrás (1988) y por Gustavo Matosas (2016)- y Wydad.

Lo que suceda en esa segunda ronda determinará los rivales de Flamengo y Real Madrid en semifinales. Los brasileños esperan al ganador de Seattle Sounders versus el ganador de Al-Ahly-Auckland City, que recién se jugará el martes 7, mientras que los merengues jugarán contra quien pase de Wydad versus Al-Hilal, el miércoles 8.

Flamengo tiene dos uruguayos: Giorgian de Arrascaeta y Guillermo Varela, dos mundialistas con la celeste en Qatar 2022. Ambos llegan tras perder la Supercopa de Brasil 4-3 frente a Palmeiras (con Joaquín Piquerez como figura). Tanto De Arrascaeta como Varela fueron titulares en esa final y sustituidos en el transcurso del segundo tiempo.

En Real Madrid, por su parte, ya se sabe que una de las estrellas es Federico Valverde. El uruguayo está en un gran nivel en los merengues, aunque últimamente han perdido pisada en La Liga.

Aquellos campeones

El Mundial de Clubes y su historia reciente tiene a pocos uruguayos campeones. Comparado con la vieja Intercontinental -Peñarol y Nacional la jugaron ocho veces- a este torneo nunca fue un equipo charrúa, por la sencilla razón de que no se gana una Copa Libertadores desde 1988.

Diego Lugano, en 2005, fue el primero en salir campeón del Mundial de Clubes, logro que obtuvo con San Pablo tras vencer en la final 1-0 al Liverpool inglés. El defensor uruguayo fue titular en los paulistas y bancó todo el partido.

Diez años más tarde, en 2015, Luis Suárez inscribió su nombre para siempre. El goleador fue figura de aquel Barcelona que goleó 3-0 a River Plate de Argentina, precisamente con dos goles del Pistolero, quien, además, fue el goleador del Mundial con cinco conquistas y elegido mejor jugador de la final.

En esa definición entre catalanes y argentinos era seguro que algún uruguayo alzaría la copa, porque, aparte de Suárez en Barcelona, en River estaban Carlos Pato Sánchez, Tabaré Viudez, Rodrigo Mora -todos titulares en la final- y Camilo Mayada -suplente-.

Valverde puede ser el único uruguayo que levante la copa por segunda vez. El ex Peñarol ya salió campeón en 2018, aunque en aquel tiempo no tenía el protagonismo que tiene ahora: integró el banco de suplentes merengue, pero no vio minutos.