La Confederación Sudamericana de Fútbol eligió el estadio Centenario como recinto para disputar la final única de la Copa Sudamericana 2023, como sucedió en 2021. La final será el 28 de octubre de este año, pero antes se deberá hacer ciertos arreglos en el recinto uruguayo.

Ricardo Lombardo, presidente de la Comisión Administradora del Field Oficial del estadio Centenario (CAFO), explicó a la diaria que ahora se deberán cambiar los planes de mejora que tenía la comisión, que eran a largo plazo.

Por ende, a su consideración, lo primero que hay que hacer es un plan maestro que reconozca distintas etapas, siendo la etapa final el Mundial de 2030, si es que gana la candidatura sudamericana para organizar dicha competencia.

“Para la posible final del Mundial en el Centenario hay que hacer cambios importantes. Ahora aparece la buena noticia de la Sudamericana, por lo que lo primero es coordinar un plan maestro que contemple todo”, sostuvo Lombardo.

El punto de partida es la coordinación. En torno a esta propuesta hay varias partes involucradas que tienen muchas ideas. CAFO es la parte mandataria de los dueños del estadio, que son la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y la Intendencia de Montevideo. Además, la Secretaría Nacional del Deporte presentó un plan al que CAFO todavía no accedió. “Vimos algunos anuncios de Sebastián Bauzá en la prensa, pero eso todavía no está en el esquema unificado que CAFO quiere manejar”, explicó Lombardo.

El dirigente explicó que se insiste con que el Centenario sea la sede de la final del Mundial en caso de que sea organizado por América del Sur porque es un símbolo. “Es algo místico. Cuando ves estadios modernos alrededor del mundo, todos tienen la misma estructura y el mismo formato. El Centenario sigue siendo una joya arquitectónica, un género escaso. En este momento, después del Mundial de Qatar, donde todo fue muy artificial, parece muy razonable que la FIFA vuelva al origen, a la esencia, a lugares donde el fútbol se vive con pasión”, consideró.

Las obras para el estadio Centenario

CAFO propone que lo primero a mejorar en el recinto charrúa es bajar el campo de juego para que las tribunas Olímpica, Amsterdam y Colombes puedan extenderse a nivel de campo y así generar una cercanía mayor entre el público y los futbolistas. Eso haría desaparecer la platea Olímpica y los taludes de Amsterdam y Colombes. CAFO reconoce que no da el tiempo para hacer estas modificaciones antes de la Sudamericana, pero es algo que debe estar en el plan.

Otro tema importante es la reestructura de la tribuna América. El objetivo es que desaparezca la platea y hacer obras en la parte interna que permitan ampliar la capacidad de la tribuna, subirla al nivel de la Amsterdam y de la Colombes para completar totalmente el circuito del estadio. “Ahí debajo hay muchas cosas para reformular, como el acceso de los futbolistas a la cancha para que no entren por lugares diferentes, sino que haya una entrada única como en todas las partes del mundo, sobre todo en los estadios FIFA”, explicó Lombardo.

Otra de las tareas para mejorar el Centenario es la realización de estudios estructurales para hacer reformas debajo de las tribunas, y la adecuación de estas a un esquema para que en ese espacio se puedan hacer actividades. “Debajo de las tribunas hay mucho espacio. Fundamentalmente en la América, para generar lugares de acceso directo a los palcos VIP, crear más palcos VIP, palcos de prensa y oficinas de uso administrativo y de otras actividades”, agregó.

A su vez, se trabajaría en el techamiento. “Más adelante va a haber que pensar en el techamiento; hoy en día se techan con estructuras livianas que no llevan mucho costo ni tiempo, pero eso debe quedar para después. Todo eso tiene que ser parte de un estudio global, de un plan maestro, y requiere coordinación entre el Gobierno Nacional, la Intendencia de Montevideo, la AUF y la propia CAFO. La coordinación es el gran desafío”, finalizó Lombardo.