Dice Alberto Guerra unilateralmente que Luis Suárez subestimó el campeonato brasileño. Parece una afirmación temeraria y hasta errónea con relación a la percepción que pueda tener uno de los mejores futbolistas del mundo de la última década con experiencia de competencia de élite.

Suárez y casi todos los individuos que viven en el mundo del fútbol de élite saben que el campeonato de Brasil, un país continente donde el fútbol es un elemento esencial para la población, es un torneo durísimo, de logística complicada y de muchos viajes. Suárez sabía que le iban a pegar como le han pegado toda la vida, que iba a ir de un lado para el otro como siempre, y que iba a entrenar y jugar a pleno como siempre. Tal vez no sabía que su rodilla lo iba a empezar a incomodar tanto que precisaba una revisión y un service, que finalmente se hará en fecha a confirmar en Barcelona.

Luis Suárez no se retira ni se va al Inter de Miami.

En boca de todos

Difícilmente podamos encontrar un deportista uruguayo de tanta vigencia en el mundo como Suárez.

No digamos que ha sido así desde su debut en Nacional, pero sí podemos aproximar que desde su paso por Holanda, donde jugó en el Groningen y en el famoso Ajax, en Inglaterra donde descolló en el Liverpool, en España con su ciclo maravilloso en el Barcelona y su gran relumbrón en Atlético Madrid, su impensada y victoriosa vuelta a Nacional, sus 16 años de selección nacional como máximo goleador y figura, y ahora desde hace un semestre acaparando la atención brasileña con su fulgurante figura.

Siempre está Suárez en boca de todos, en los espacios deportivos de los medios y en los que no lo son específicos también, en los hinchas, en los dirigentes.

Siempre mueve Luis, y en este caso ha concentrado una intensísima actividad desde su llegada a Porto Alegre, provocando una eclosión popular, en las canchas, en las redes rivales, en las calles y también en los ámbitos dirigenciales.

Guerra sin paz

Hace diez días parte del mundo futbolero se sacudió con una falsa noticia que anunciaba el retiro del goleador. Hace ocho días Luis salía a la cancha marcando la victoria de Gremio con un gol y una asistencia. Después de la victoria ante América Mineiro, habló en conferencia de prensa el entonces vicepresidente de Gremio, Paulo Caleffi, que sin negar los problemas sanitarios de Suárez llevó tranquilidad a los torcedores en cuanto a que Luis seguiría jugando hasta el fin de su contrato.

Unos días más tarde, el presidente, Alberto Guerra, cesaría a Caleffi en su cargo, y entonces ante tamaño movimiento en las últimas horas programó una conferencia de prensa con la intención de presentar a Antonio Brum como nuevo vicepresidente, pero, como era de esperar, se trató de desenredar la situación de Suárez.

En casi media hora de respuestas el presidente de Gremio habló y respondió casi exclusivamente acerca del caso de Suárez.

La primera pregunta que apuntó a la búsqueda de la verdad sobre el caso se apoyó en la incertidumbre e interrogaba al presidente. “El hincha gremista se preocupa mucho con la situación de Luis Suárez, preocupación por el cumplimiento de su contrato, por el dolor en su rodilla, del que habló el técnico en el final del último juego. ¿Esta garantido que Suárez cumpla su contrato con Gremio? ¿Por qué Renato dijo el fin de semana que había algunas cosas además del dolor de rodilla, que serían esas cosas?”, preguntaron.

Guerra respondió: “Con relación a Suárez, Gremio no controla sólo a Suárez, Gremio no puede ser pautado por todo aquello que sale en las redes, sea por medios, influencers, blogueros, en Uruguay o España, o en cualquier lugar; yo voy a estar siempre en esta silla respondiendo con la verdad, esa es mi misión. Dicho esto, vamos a la verdad. Suárez ha jugado todos los partidos, ha sido el mejor jugador, ha hecho goles en muchos partidos, y ha entrenado normalmente acá en Gremio.

Ahora viene la información que ustedes tanto esperan. Lo que podemos informar de esta situación es que Suárez efectivamente tiene un dolor en la rodilla y eso no es ninguna novedad; Suárez hubiera subestimado al campeonato brasilero, es una logística muy complicada, a él le pegan mucho por decir así, y tiene que hacer un esfuerzo tremendo para un jugador de la edad de él.

El dolor es normal en el futbol y los jugadores aprenden a convivir con él. Suárez quiere consultar con su médico en Barcelona, y Gremio lo acepta, estamos viendo el mejor momento buscando los intereses de Gremio principalmente en la Copa de Brasil”

Un rato después alguien quiso saber cuándo y si Luis iba a hablar. “Usted manifestó que Gremio acordó junto con Suárez de tratarse el dolor en la rodilla con su médico particular. ¿Gremio ya invitó a Suárez a manifestarse sobre todo el tema de la rodilla?”.

Y el presidente gremista respondió: “Buscamos una fecha que sea buena para él y compatible con los intereses del club, él juega con dolor, con alguna cosa que lo perjudica, pero él juega, entonces la idea es encontrar algo que sirva para los intereses de los dos lados. Sobre lo segundo, Suárez es un jugador que habla poco, pero eventualmente después de resuelto, hablará.”