En la primera de las dos finales que se juegan para definir al campeón de la Copa Nacional de Clubes A 2023, Laureles de Fray Bentos consiguió como visitante una estupenda victoria 2-1 ante Universitario de Salto, lo que le deja dos resultados a favor para cuando todo se decida el domingo en Fray Bentos, donde los albiverdes, si ganan o si empatan, serán por primera vez campeones del interior.

Los goles en el Dickinson los anotaron para Laureles Sebastián Rosano, cuando aún no se había cumplido ni un minuto de juego del partido, y Junior Rodríguez, desafortunadamente en contra, mientras que el de Universitario, que fue el empate parcial en el segundo tiempo, fue anotado de penal por Martín Silva.

Como las finales se deciden por puntos, los raneros saben que no podrán ser superados, por lo que si en Fray Bentos el vencedor es Universitario, se decidirá por goles –no se ponderan de manera especial las anotaciones de visitante, por lo que si hubiese también igualdad, allí se debería ir al alargue y, si es necesario, se decidiría en los penales–.

Es mucho más simple la definición si se confirma la tendencia de Laureles, dado que si gana o empata, el viejo club de las orillas del arroyo que lleva su nombre será campeón.

Algo único

El estadio lleno es siempre una maravilla para el fútbol. La tribuna España estaba llena de salteños que debieron apurar el almuerzo dominguero para encontrar un lugar para ver la tercera final de la U.

Enfrente, en la Irazoqui, cientos de fraybentinos que debieron salir de su pueblo de mañana y con bollos, refuerzos o milanesas al pan, regadas con un buen mate, para llegar a tiempo. Muchas excursiones y decenas de autos copando la ruta 3 de sur a norte para hacer los 240 kilómetros que separan a Fray Bentos de Salto.

Cuando calentaba el solcito invernal de las primeras horas de la tarde, el Dickinson, el único estadio de gran porte de la OFI que no es municipal, y el único propiedad de una liga de fútbol, la Liga Salteña, estaba pronto y en plenitud para ser el set vivencial entre miles de voces, aromas, banderas y bengalas de colores.

Laureles la empezó ganando a los 30 segundos y no fue de casualidad, porque seguramente ese enorme conductor y estratega que es Miguel Cerrilla, que tomó la conducción de los raneros cuando estaban al borde de la eliminación y del descenso en la serie y desde la penúltima fecha de la primera fase no ha parado de avanzar, había pensado y fundamentado la estrategia de atacar de entrada. Fue así que el mercedario Alain Batto avanzó después de que los salteños la perdieran en el saque inicial y se la filtró para la furibunda entrada por derecha de Rosano, que metió un derechazo brutal al ángulo del arquero riverense de Universitario, David Freitas, que nada pudo hacer en esa instancia.

Aquel gol cambió por completo todos los planes de los locales y reafirmó la seguridad de los fraybentinos, a través del trajín del mediocampo y el despliegue por fuera del sanducero Brian Sabaño y del fraybentino Rosano, con el juego cerca del área del salonista Batto.

Universitario trató por medio del juego con capacidad de Silva de hacer jugar al determinante Valentín Fornaroli, enlazando para George dos Santos, Joaquín Jaques y Diego Llama, pero no pudo con la inconmovible línea defensiva liderada por Charles Zoryez, que fue un león en todo el juego, pero que, a partir de la acumulación de cuatro amarillas, ya no podrá jugar el próximo domingo en el Liebig’s.

En la segunda parte, cuando la U seguía desarmada, pero buscando llegar al área rival, pudo convertir el empate a través de un penal que le hicieron y que convirtió Silva. Parecía que se podía enderezar el juego para los rojos, pero Laureles mantuvo su impostura de ir por el triunfo y lo consiguió con un gol que fue en contra, pero que bien pudo haber sido de Exzequiel Vázquez, que definió casi en el área chica.

De ahí para adelante los raneros sostuvieron con seguridad el triunfo y estuvieron cerca de llegar a la tercera conquista.