Racing consiguió una gran victoria en Melo frente al difícil Cerro Largo, que perdió de local. El equipo de Eduardo Espinel, que deberá enfrentar sus cotejos también por Copa Sudamericana, cumplió con una buena previa, afirmándose en el Torneo Apertura.
Volvió a aparecer Tomás Verón Lupi en La Academia y comandó el ataque, que fue efectivo en la tarde del viernes en el norte del país. Adelante, Dylan Nandín, el futbolista nacido en Cerro, fue un peligro constante para Mauro Brasil y los suyos. El equipo de Sayago volvió a ganarle al Arachán, a quien había vencido por Copa Sudamericana, para terminar de confirmarse en el grupo que deberá enfrentar a la brevedad. Más precisamente, desde el 2 de abril, cuando enfrente a Corinthians. Además, comparte un grupo complejo con Argentinos Juniors y Nacional de Paraguay.
El equipo de Eduardo Espinel se plantó entonces en el Torneo Apertura a pesar de que le costó, como es sabido, el estadio Ubilla de la ciudad de Melo. Desde el banco de los suplentes apareció la diferencia y el partido terminó por abrirse con un contragolpe: una jugada perfecta de salida entre Erick de los Santos y Martín Ferreira, que cumplió con la ley del ex y pidió perdón a la hinchada.
Para definir el partido, Nicolás Sosa, un hombre de la casa también, liquidó el partido y volvió a ganarle el duelo a su hermano, Sebastián Sosa, el ex Vélez, que es de los mejores del equipo locatario. Junto a Hugo Silveira y el paraguayo Gianluca Fatecha fueron la apuesta de Bruno Silva para doblegar a los capitalinos. Sin embargo, Silva deberá seguir trabajando para encontrar el rumbo del conjunto de Cerro Largo.
Racing, por su parte, se prepara para enfrentar la semana que viene a Corinthians en un duelo histórico para la institución. El grupo que le tocó al equipo de Sayago no es nada sencillo, pero puede tener fisuras que el equipo de Espinel deberá aprovechar. Es un equipo inteligente dispuesto por un entrenador inteligente que espera dejar una buena imagen más allá de fronteras.