Uruguay tenía que ganar y ganó. Fue inteligente, hizo los goles cuando se necesitaban –y cuando más le duelen al rival–, estuvo bien parado en defensa y pillo en ataque. En la mitad de la cancha, por su parte, estuvo lo mejor, sobre todo en la creación.

Lo sabe el destino y hasta la pelota: si Rodrigo Bentancur juega, es figura. El Lolo fue el mejor desde la propuesta, siendo, como volante más bien doble cinco, el motor de juego de Uruguay. Giorgian de Arrascaeta fue un muy buen socio y entre los dos fueron artífices del 2-0. Manuel Ugarte también estuvo a la altura de las circunstancias, lo mismo que Rodrigo Aguirre, que como un déjà vu sigue haciendo goles en el Centenario.

Santiago Mele (6): no le dieron mayor trabajo, pero cuando tuvo que laburar lo hizo de buena forma.

Nahitan Nández (5): volvió al lateral derecho y jugó bien, dentro de lo planificado, cerrando como siempre el sector y tratando de sumarse al ataque cuando la jugada lo pedía.

Ronald Araújo (5): firme con Salomón Rondón, un delantero de calidad que venía con buenos rendimientos en su selección.

José M Giménez (6): el capitán tiene una valoración similar que la de su compañero de zaga, aunque por ahí se destacó más peleando pelotas en los centros que Uruguay tuvo a favor.

Mathías Olivera (5): bien esta vez, mucho mejor que los 45 minutos que hizo en Asunción. Se dedicó a cerrar su lateral y lo logró.

Rodrigo Bentancur (7): una garantía de calidad, un certificado al buen fútbol; sin ser una locura de partido, el de Nueva Helvecia se destacó por la lectura de juego y su dinámica en la mitad de la cancha.

Manuel Ugarte (6): primero hay que destacar que los corrió a todos; segundo, que se asoció bien con los demás volantes; tercero, que fue voz de mando cuando el equipo quedaba mal parado.

Giorgian de Arrascaeta (7): picante, incisivo, con gol; volvió y se sacó la mufa tras un mal partido contra Paraguay y varios rendimientos en los que no podía dar todo lo que se espera de él.

Facundo Pellistri (5): sigue entreverado, pero al menos esta vez se escapó en varias ocasiones y los venezolanos le vieron el número; debe mejorar en el último pase y vuelve a ser el que fue.

Rodrigo Aguirre (7): ya había sido de lo mejorcito en el partido anterior, aunque su destaque no fue exclusivamente por lo que hizo en ataque; esta vez sí, porque la metió cuando era importante, porque generó espacios para sus compañeros y porque con un poco de suerte hacía otro gol.

Maximiliano Araújo (5): repuntó, tuvo dos o tres piques en los que fue un invierno para el lateral derecho de la vinotinto; también, igual que Pellistri, debe mejorar en el último pase y ahí Uruguay explota.

Ingresaron

Sebastián Cáceres (-): entró por Bentancur: cambio rari; fluctuó entre el mediocampo y la zaga, por momentos siendo tercer zaguero, por otros, un segundo volante de contención.

Guillermo Varela (-): entró por Nahitan Nández, que salió fundido. No tuvo tiempo de casi nada.

Nicolás Fonseca (-): otro con poco tiempo, aunque anduvo entreverado en alguna jugada ofensiva de Uruguay: pidió penal, pero fue zambullón.

El resto del plantel

Quienes completaron el banco de suplentes fueron Cristopher Fiermarin y Franco Israel; Santiago Bueno, Lucas Torreira, Rodrigo Zalazar, Cristian Olivera, Brian Rodríguez y Agustín Álvarez.

Por decisión técnica, antes del partido quedaron desafectados Nicolás Marichal, José Luis Rodríguez, Emiliano Martínez, Juan Manuel Sanabria, Facundo Torres y Luciano Rodríguez.