Los primeros meses del rectorado de Rodrigo Arim en la Universidad de la República (Udelar) estuvieron marcados por las dificultades para el nombramiento de su equipo de gestión, pero esa situación comenzó a destrancarse en las últimas semanas, a casi cuatro meses de haber asumido el cargo. Este martes el Consejo Directivo Central (CDC) de la institución confirmó en el cargo a los cuatro prorrectores que la Asamblea General del Claustro (AGC) votó hace dos semanas y el año pasado había votado el nombramiento de Rodney Colina en la Comisión Coordinadora del Interior. Además, el CDC ya votó a los dos primeros asistentes académicos del rector, Diego Pérez y Carolina Cabrera, pero ahora Arim busca terminar de conformar el equipo con las horas para estos cargos que aún tiene disponibles. Para ello, el rector ingresó al órgano dos nuevos nombres, el de la licenciada en Bioquímica y magíster en Ciencias Biológicas Virginia Villalba y el de la contadora Alejandra Pereira, ambas con experiencia en gestión universitaria. De todas formas, a pedido de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay sus nombramientos fueron postergados en la sesión del martes.
Los primeros meses de gestión también le sirvieron a Arim para proyectar en qué áreas pondrá el foco durante 2019 y, según comentó a la diaria, una de ellas será la preparación de una propuesta de ley presupuestal quinquenal para la institución de cara a 2020, a ser presentada ante el gobierno y el Parlamento. Para el rector, la propuesta de la Udelar debe sostenerse “en un diagrama de programas de desarrollo institucional en todas las funciones, que sea claro, transparente y esté presupuestado”. Además, consideró que estas líneas deben ser “comprensibles para la opinión pública en general” y para los actores universitarios, lo que “implica un enorme esfuerzo de reflexión y de diseño de políticas”, ya que condicionará lo que la Udelar pueda hacer en todo el período. Para ello, desde el rectorado se propondrá al CDC que conforme una comisión específica, “que tenga como objetivo central la definición de líneas programáticas para el período 2020-2025”, con la aspiración a que también se pueda “establecer un programa que muestre lo que va a hacer la Udelar también más a futuro”, con la “fuerte participación” de los órdenes.
Democracia interna
Según adelantó Arim, otro de los “hitos” para la Udelar este año será la generación de instancias para “repensar la institucionalidad” interna a fin de “darle la flexibilidad y versatilidad que requiere y, al mismo tiempo, mejorar la calidad de la vida democrática” en la institución. Al respecto, el rector mencionó que hay varios servicios universitarios que no cuentan con voto en el CDC y algunos que ni siquiera tienen voz en la AGC, como los centros regionales del interior. “Tenemos que lograr identificar cuáles son los aspectos de nuestro funcionamiento democrático que pueden mejorar sin cambiar la Ley Orgánica (LO) y cuáles son los que sí requieren una modificación de la ley.
Consultado sobre cuál es la mejor forma de canalizar esa discusión, Arim entendió que podría generarse una comisión mixta del CDC y la AGC, donde se genere un espacio “amplio, que se dé los tiempos para la elaboración democrática y la discusión deliberativa, pero a la misma vez vaya generando acuerdos y poniendo los desacuerdos en negro sobre blanco”. Estos insumos serían los que se tomen en cuenta para el cambio de la LO, partiendo de los documentos de la última discusión en ámbitos institucionales de la Udelar para cambiar la norma, durante el último rectorado de Rodrigo Arocena. Según Arim, cambiar la LO “requiere acuerdos amplios internos” pero “no unanimidades”, para luego presentar la propuesta en el Parlamento.
A la obra
Consultado sobre el desarrollo de las obras edilicias de la Udelar, Arim proyectó que el Plan de Obras de Mediano y Largo Plazo de la institución no sufrirá grandes cambios. En este momento, en la institución se está evaluando qué obras se podrán terminar en los próximos dos o tres años con los recursos ya presupuestados, “de forma de abrir la cancha para iniciar nuevos procesos de planificación de obras relevantes”, señaló. Según adelantó el jerarca, las obras del nuevo predio de la Facultad de Veterinaria culminarán “posiblemente en tres años”, lo que implicará mudar la facultad y liberar el terreno actual. En relación con las obras del predio del Área Salud en el Parque Batlle, señaló que “la obra continúa” y la institución está “buscando los mecanismos financieros” para asegurar que se completen todas las fases, que, por ejemplo, en su etapa final incluye la mudanza total de la Facultad de Enfermería. Con respecto a las obras del plan que no se van a poder concretar con el actual presupuesto –pero se espera que se puedan hacer con el siguiente–, señaló que las más importantes son las de la nueva Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y la culminación de la remodelación de la Facultad de Química.
Según el rector, se debería hacer una intervención “quirúrgica” en la LO. Esto implica “identificar con claridad cuáles son los artículos que hoy generan dificultades en términos de la calidad de la vida institucional de la Udelar, intervenir sobre esos artículos y, a la misma vez, generar una nueva ley que tenga la capacidad de que la propia institución pueda transformarse en el futuro”. De lo contrario, se generaría “una discusión que va a resurgir cada diez o 15 años”, que, por ejemplo implicaría volver al Parlamento para incluir en la gobernanza a los servicios que se creen en los próximos años.
Descentralización
Otro de los temas que este año el rectorado pondrá en la agenda será un “reimpulso del proceso de desarrollo de la Udelar en el interior”. Al respecto, el jerarca consideró que el proceso de descentralización de la institución “está dando resultados interesantes”, pero al mismo tiempo “genera nuevos desafíos y obliga a generar respuestas”. Arim señaló que en 2017 cerca de 16% de los estudiantes que ingresaron a la Udelar lo hicieron en el interior, porcentaje que en 2005 era menor a 4%, lo que “da una idea de la magnitud de lo que estamos viviendo”.
Según el rector, “es necesario tomar algunas medidas que flexibilicen el funcionamiento de la institución” fuera de la capital. “En este momento tenemos un conjunto de requerimientos administrativos que hacen que algunos procesos sean muy pesados: expedientes que comenzaron en junio del año pasado están terminando recién ahora, con decisiones que son de corte político-administrativo pero de menor envergadura, como la extensión horaria de un docente”, ilustró. Además de “darles celeridad a los procesos de gestión”, para el jerarca es necesario “evaluar lo hecho en el interior y volver a generar una estrategia de desarrollo”.
En suma, al rector le preocupa que las restricciones presupuestales para la institución en 2019 no hagan que “ciertas generaciones de académicos opten por no dedicarse a la vida académica o decidan emigrar”. En ese sentido, apuntó al programa de Dedicación Total (DT) docente de la Udelar, que “en algunas áreas del conocimiento es la única herramienta que tiene el país para retener ciertas capacidades de investigación”. En los últimos años, la institución ha tomado medidas para mantener el programa, como destinarle recursos que originalmente estaban previstos para aumentos de salarios.
El rector también evaluó que la Udelar tiene “un problema en relación con la evolución del número de estudiantes y las horas docentes”, que “en los últimos años por primera vez se comienza a deteriorar nuevamente”. Según explicó, esto se debe a restricciones presupuestales, en un marco de aumento de la matrícula. “Eso hay que atenderlo porque Uruguay necesita tener más estudiantes universitarios, por lo que tenemos que hacer un esfuerzo muy grande no solamente para que ingresen a la universidad sino para que permanezcan en la institución y dar una enseñanza de calidad. Es importante no perder pie en la cantidad de horas docentes con las que cuenta la institución para poder atender a una población que sigue creciendo a tasas elevadas, en el interior en particular”, evaluó.
En agenda
Arim indicó que durante 2019 la Udelar abordará temas que tienen que ver “con la gestión cotidiana”. Por ejemplo, habló del “vínculo entre los recursos extrapresupuestales, las fundaciones y la Udelar”, cruce en el que “hay toda una agenda que tenemos atrasada desde hace unos años y que hay que ir resolviendo”. Al mismo tiempo, el rector entendió que se deben combinar “miradas de largo plazo, que nos lleven a pensar en una ley de presupuesto que apunte a transformar a la Universidad para transformar el sistema de educación terciaria y superior uruguayo”.
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