Se presentó ayer la segunda edición del estudio producto de la red Global Kids Online, que tiene base en Uruguay: un nuevo informe sobre el comportamiento de niños, niñas y adolescentes en internet. En el país, el equipo de coordinación del estudio se compone por Ceibal, la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento; Unicef, Unesco y la Universidad Católica del Uruguay.

La muestra del estudio de Kids Online Uruguay 2022 “representó a estudiantes que se encontraban cursando entre tercer año de educación primaria y sexto año de educación media en centros de educación formal urbanos de todo el país”, es decir, 96% de quienes tienen entre nueve y 17 años. Para alcanzar a esa población, hicieron, por un lado, encuestas, que también incluyeron a referentes adultos, y, por otro lado, grupos focales para profundizar los resultados.

Uno de los principales y más generales resultados del estudio es que nueve de cada diez estudiantes se conectaron a internet diariamente desde su hogar, y siete de cada diez lo hicieron todos los días desde su centro educativo. A su vez, las actividades que más desarrollan tienen que ver con el entretenimiento: 95% declaró utilizar Youtube, 87% Whatsapp, 77% Tik Tok y 72% la plataforma Crea de Ceibal. En cuanto a los juegos, el más utilizado es el Minecraft (49%), seguido por el Roblox (41%) y los vinculados con el fútbol, como el FIFA o el PES (37%).

De acuerdo al estudio, nueve de cada diez estudiantes declararon “aprender algo nuevo en internet todas las semanas”. 95% dijo que la actividad semanal que más realizan es ver videos, series o películas y 91% manifestó ser asiduo a “una actividad vinculada al conocimiento: aprender algo nuevo”, así como a “chatear”.

El tiempo que los menores de edad pasan en internet fue otro de los puntos consultados. Al respecto, se reveló que por ese motivo 29% de los adolescentes tuvo problemas con su familia o amigos y que el mismo porcentaje bajó sus notas. A su vez, 26% declaró haber dejado de comer o dormir.

Comunicaciones

La mayoría de los estudiantes consultados utilizan las redes digitales como “canales de comunicación”, principalmente con su familia, amigos y conocidos, “y, en menor medida, con extraños”. Los juegos en línea también fueron otro de los espacios por los que se comunican, tanto con conocidos como desconocidos. Precisamente, tres de cada diez declararon haberse encontrado presencialmente con personas que conocieron primero por internet, una cantidad que aumenta a medida que la edad es más elevada. En la mayoría de los casos, los encuentros fueron con personas de su misma edad, aunque 2% fueron con un adulto.

El estudio plantea que el tipo de actividades que los estudiantes llevan a cabo en internet está asociado a la edad que tengan y, como ejemplo, los de menor edad manifestaron tener “más apoyo de padres y madres en su uso de internet y les cuentan más sobre lo que hacen en el entorno digital”. Aún así, también los de menor edad aseguraron “tener menos habilidades para responder a los peligros y riesgos del entorno digital”: 52% de quienes tienen entre nueve y 12 años manifestaron saber cómo denunciar una publicación, mientras así lo afirmaron 89% de los adolescentes de entre 16 y 17 años.

Por su parte, 54% de quienes tienen entre nueve y 12 años y 67% de los y las adolescentes de 16 y 17 manifestaron que “les es fácil darse cuenta si la información en internet es verdadera”.

Violencias y género

Las diferencias de género de la sociedad también se reflejan en los entornos digitales: de acuerdo a lo analizado por Kids Online Uruguay, los comportamientos reproducen estereotipos y “están fuertemente diferenciados” por el género. De esa forma, “los varones juegan más en internet a juegos como Clash Royale y Fortnite, y las mujeres utilizan más redes sociales, como Instagram y Tik Tok”.

Asimismo, “las mujeres que juegan en línea manifiestan que son discriminadas por su género” y, al mismo tiempo, “las y los adolescentes perciben que el entorno digital es más agresivo y violento con las adolescentes mujeres que con los varones”.

Los episodios de violencia tienen lugar en los distintos géneros, pero se acrecientan en las mujeres y en quienes no se identifican con el género masculino o femenino: en total, uno de cada tres varones declaró “haber sufrido algún episodio negativo en internet durante el último año”, cifra que sube a cuatro de cada diez en mujeres y estudiantes no binarios.

En relación con los contenidos a los que acceden, 41% de adolescentes manifestaron haber estado expuestos a “contenido violento” y 37% a “contenido discriminatorio”. No obstante, la exposición a contenidos como “discriminación, aliento a la bulimia o la anorexia” o el suicidio “afecta a más de uno de cada cinco adolescentes escolarizados”, pero las mujeres y los adolescentes no binarios “reportan mayor exposición a estos contenidos”.

Por otro lado, el “maltrato” fue identificado como más frecuente en la presencialidad que por internet, “aunque existe una superposición entre ambos fenómenos”. Cuando es en línea, parte principalmente de “amigos y compañeros de clase” más que “de desconocidos o adultos”. En concreto, 45% proviene de amigos, 29% de compañeros, 26% de desconocidos de su edad y 15% de desconocidos más grandes.

Los contenidos sexuales, tanto en el envío como en la recepción, son más usuales a medida que aumenta la edad. En cuanto a los estudiantes de educación media, casi uno de cada cuatro recibió este tipo de mensajes y “uno de cada diez los ha enviado”. Al respecto, el estudio asegura que “existen riesgos asociados a la práctica del envío y la recepción de mensajes con contenido sexual, sobre todo si no son consensuados o provienen de personas desconocidas o adultas”.

Los niños, niñas y adolescentes esgrimieron que “sus pares son sus principales referentes” a la hora de contar este tipo de episodios, y en segundo lugar se ubican sus padres y madres, que en los de menor edad son mediadores en el uso de internet “con mayor intensidad”. En todas las edades, igualmente, su mediación “es valorada positivamente”.

Allí también se atraviesan “las desigualdades de género”: por un lado, “las adolescentes y niñas reportaron mayor mediación con foco en el cuidado por parte de los adultos” y, por otro lado, “las madres tienen mayor información que los padres sobre los usos, hábitos y preferencias de sus hijos e hijas en el entorno digital”.

En porcentajes, 58% de los varones reportó que “padres, madres y tutores los animan a que exploren y aprendan cosas en internet”, mientras que la cifra baja a 51% en las mujeres; en suma, 63% de los varones y 70% de las mujeres reciben sus consejos “sobre formas seguras de internet”.

En resumen, Kids Online Uruguay puntualizó que el uso de internet y el desarrollo de habilidades digitales en menores de edad “conlleva siempre la doble condición de potencial y riesgo”. Aún así, aseguró que “el riesgo en internet, como en la vida en general, no implica necesariamente daño” y planteó que “es posible desarrollar estrategias” para que “ejerzan un uso de internet positivo y que potencie su bienestar”.