Las protestas que se desataron el 16 de setiembre en Irán tras el asesinato de Mahsa Amini, y que protagonizan las mujeres bajo la consigna “Mujer, vida, libertad”, continúan en el país pese a la represión de las autoridades y a las denuncias de violaciones de derechos humanos contra manifestantes detenidos. Desde ese día hasta el 2 de noviembre, 277 personas fueron asesinadas en el marco de las manifestaciones, según reportó la organización civil Iran Human Rights. Esa cifra incluye a 24 mujeres y a 40 niñas, niños y adolescentes.

Ante este escenario, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, anunció este miércoles que su gobierno trabajará junto con sus socios para expulsar a Irán de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), encargada de promover y proteger los derechos de las mujeres. Esta comisión está integrada por 45 países y sus miembros son elegidos por un período de cuatro años. Irán empezó a participar en marzo de este año.

“Estados Unidos cree que ninguna nación que abusa sistemáticamente de los derechos de las mujeres y las niñas debe desempeñar un papel en ningún organismo internacional o de las Naciones Unidas encargado de proteger estos mismos derechos”, sentenció Harris en un comunicado. Agregó que Irán “ha demostrado a través de su negación de los derechos de las mujeres y su brutal represión contra su propio pueblo que no es apto para servir en esta comisión” y que su “sola presencia” “desacredita la integridad de sus miembros y el trabajo para avanzar en su mandato”.

La primera mujer en llegar a la vicepresidencia de Estados Unidos reiteró que su país “continúa apoyando a las valientes mujeres de Irán mientras protestan pacíficamente por sus derechos fundamentales y la dignidad humana básica”. Al mismo tiempo, abogó por que “todas las personas en Irán deben tener derecho a la libertad de expresión y reunión”, y llamó a las autoridades de Teherán a “poner fin al uso de la violencia contra sus propios ciudadanos simplemente por ejercer sus libertades fundamentales”.

“A quienes protestan les repito: los vemos y los escuchamos. Me inspira su valentía, al igual que personas de todo el mundo. Continuaremos responsabilizando a los funcionarios y entidades iraníes de la violencia contra los manifestantes”, apuntó Harris.