Poco después de que empezaran a aplicarse en Uruguay las vacunas contra la covid-19, mujeres comenzaron a compartir en las redes sociales haber experimentado alteraciones en su ciclo menstrual luego de la vacunación. Algunas sostuvieron que su menstruación se retrasó, otras plantearon haber tenido un sangrado más abundante de lo habitual o sentir mayores molestias. Esto no ocurrió sólo en Uruguay, sino en varios países del mundo. En algunos de ellos, las dudas y reportes de mujeres en centros de salud sobre las alteraciones del ciclo tras recibir la vacuna impulsaron investigaciones científicas al respecto.

En setiembre de 2021, la revista científica British Medical Journal publicó el artículo “Cambios menstruales después de la vacunación covid-19”. Para su elaboración se tomaron en cuenta los reportes de 30.000 mujeres ante la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios de Gran Bretaña que afirmaron haber experimentado modificaciones en la menstruación luego de ser vacunadas contra la covid-19, independientemente del tipo de vacuna (Pfizer, Moderna, Sinovac, Astrazeneca, entre otras).

Las mujeres manifestaron atrasos en la menstruación y volumen de sangrado inusual. Sin embargo, la mayoría afirmó que al mes siguiente el ciclo retornó a la normalidad. Entre los hallazgos de este análisis se resalta que no se registraron afectaciones en la fertilidad. “Los mecanismos biológicos que relacionan la estimulación inmunológica con los cambios menstruales incluyen influencias inmunológicas sobre las hormonas que impulsan el ciclo menstrual o efectos mediados por células inmunes en el revestimiento del útero, que están involucradas en la acumulación y degradación cíclica de este tejido”, sostiene la inmunóloga y autora de la publicación Victoria Male.

Aunque los cambios informados en el ciclo menstrual después de la vacunación son de corta duración, la experta advierte que la “investigación sólida sobre posibles reacciones adversas [en el período] es fundamental para el éxito general de los programas de vacunación”. “Las dudas sobre las vacunas entre las mujeres jóvenes se deben en gran medida a afirmaciones falsas de que las vacunas contra la covid-19 podrían perjudicar sus posibilidades de embarazos futuros. La información clara y confiable es particularmente importante para aquellas que confían en poder predecir sus ciclos menstruales para lograr o evitar el embarazo”, agrega.

Alteraciones leves

Esta publicación fue una de las primeras en recolectar los relatos anecdóticos de mujeres y sentó las bases para otros estudios. El 5 de enero la revista Obstetrics & Gynecology publicó la investigación “Asociación entre la duración del ciclo menstrual y la vacunación contra la covid-19”. La investigación fue realizada por un grupo de investigadoras e investigadores de la Universidad de Oregón y financiada por el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (INH, por sus siglas en inglés).

El estudio evaluó 23.754 ciclos menstruales de 3.959 mujeres (2.403 vacunadas y 1.556 no vacunadas) de entre 18 y 45 años con ciclos de duración normal (24 a 38 días). En el caso de las mujeres que recibieron una vacuna, se tomaron en cuenta tres ciclos previos a la primera dosis y tres posteriores –incluido el ciclo durante el mes de la vacunación–. En tanto, en el caso de las personas que no fueron vacunadas se analizaron seis ciclos consecutivos y se consideró el cuarto como el primer período después de una inoculación ficticia.

En general, las personas vacunadas contra la covid-19 experimentaron un aumento de un día en la duración de su ciclo menstrual tras vacunarse, mientras que las personas no vacunadas no manifestaron cambios en el cuarto ciclo en comparación con los primeros tres ciclos menstruales. Las mujeres que recibieron dos dosis de la vacuna (358) presentaron mayores cambios. Este subgrupo experimentó un aumento de dos días en la duración del ciclo, y 10,6% (38) tuvo un aumento de ocho días o más.

El equipo de investigación aclara que los resultados obtenidos “no pueden explicarse por el estrés pandémico generalizado porque nuestro grupo de control no vacunado no vio cambios durante un período de tiempo similar”. Asimismo, afirman que los cambios registrados no son “clínicamente significativos” y, por lo tanto, son positivos. No obstante, destacan la pertinencia de informar a las mujeres que estas modificaciones pueden ocurrir tras recibir la vacuna e incluir estos posibles cambios en los listados de efectos adversos de las vacunas.

Resultados “tranquilizadores”

Victoria Prieto, doctora en Biología Molecular y Celular del Institut Pasteur de Montevideo (IP), integrante de la Comisión de Género de este instituto y diplomada en género y políticas públicas, resaltó que una de las fortalezas de la investigación de la Universidad de Oregón es su carácter prospectivo. Es decir, que desde el inicio se planificó investigar este tema “metódicamente y sistemáticamente”.

Sin embargo, sostuvo que hubiera sido mejor “haberlo hecho antes”. “Hay artículos que ya desde fines de diciembre de 2020 plantean que no se estaba teniendo en cuenta las variables sexo y género en estudios clínicos de la covid-19 en sí misma ni en los ensayos de vacunas contra la enfermedad”, expresó. Prieto consideró que eso hubiera puesto sobre la mesa la incorporación de estos impactos en la lista de efectos secundarios de la vacuna.

“De esa forma, cuando las personas que menstrúan se van a vacunar sabrían que pueden tener una afectación en el volumen del sangrado o en la duración en uno o dos ciclos, de la misma forma que pueden sentir dolor en el lugar del pinchazo o malestar corporal. Así, pueden quedarse tranquilas y no se generan rumores como que la vacunación puede afectar la menstruación [de una forma grave] o la fertilidad”, agregó.

Sobre la interpretación de los resultados, Prieto dijo que “hay que ser muy cuidadosos” y que no se entiendan como “antivacunas”, sino que por el contrario se está “promoviendo una mayor aceptación y adhesión a la vacunación” mediante la generación de más información.

Asimismo, resaltó que la investigación tiene otros “dos valores” importantes. Por un lado, “valida lo que las personas que menstrúan estaban reportando y sintiendo, y no descarta esos planteos de plano. Es muy importante escuchar los relatos de las personas sobre lo que les estaba pasando”. Por otro lado, “las conclusiones son importantes” porque si bien la modificación del ciclo es en promedio de un día, “no afecta más nada, es un efecto pasajero y tampoco se afecta la fertilidad”.

“El estudio es tranquilizador en esos dos planos. Se escuchó, se estudió y se comprobó que no hay efectos importantes desde el punto de vista ginecológico, que reconoce una alteración en la menstruación cuando tiene una duración de ocho días o más”, manifestó Prieto.

Otros estudios

En España, la Universidad de Extremadura publicó a mediados de enero de este año los resultados de una encuesta que respondieron 17.500 mujeres. Los resultados preliminares indican que entre 45% y 50% de las mujeres participantes atravesaron algún tipo de alteración en su ciclo menstrual tanto tras haber atravesado la enfermedad como después de haber recibido la vacuna contra el coronavirus.

De las participantes vacunadas, 46,8% informó alteraciones en la duración del ciclo menstrual y 44,5% en la cantidad de flujo durante el período tras recibir la primera dosis. Estas cifras aumentan hasta 49% respecto de la duración del período, sangrado y, además, sintomatología, y alrededor de 44,8% aseguró que los cambios se mantienen hasta el día de hoy.

“Hubo personas que sostuvieron que se les atrasó la regla o se adelantó, y personas que han tenido sangrados excesivos. También ha habido empeoramiento de patologías de base como mujeres con dismenorrea o síndrome premenstrual”, sostuvo la ginecóloga Miriam al Adib, una de las responsables de la encuesta, en una entrevista con el medio español El Salto. Añadió que no sólo se han reportado síntomas a nivel hormonal, sino que “se han visto ganglios en las axilas y bultitos en las mamas”.

Al Adib explicó que la investigación científica en sí misma comenzará a partir del análisis de los resultados de la encuesta. Las y los investigadores se centrarán en las sintomatologías reportadas por las mujeres y las separarán entre alteraciones leves y severas. De todas formas, esperan que todas las alteraciones posibles aparezcan en la ficha técnica de la vacuna.

Sesgo de género

Históricamente ha existido un sesgo de género en la medicina que invisibiliza los efectos de los medicamentos en las mujeres, pero esta realidad ha empezado a cambiar lentamente. “Desde 2016, la NIH está tratando de impulsar y reforzar indicaciones de que, al momento de reclutar personas para los estudios clínicos, haya representatividad paritaria. Hay lineamientos, se está mejorando, pero aún falta muchísimo para que por lo menos la variable sexo esté incorporada desde los estudios preclínicos”, dijo Prieto.

La investigadora citó un estudio publicado por la revista científica Multidisciplinary Digital Publishing Institute el 15 de noviembre de 2021, en el que un equipo de especialistas de la Organización Mundial de la Salud en Suiza analizó un total de 75 estudios relacionados a las vacunas de covid-19 y se detuvo específicamente en la incorporación de sexo y género en las investigaciones. La conclusión fue que “hubo seis millones y medio de dosis no estudiadas adecuadamente en este aspecto”.

“Hubo una oportunidad increíble de tener un montón de información que no se aprovechó”, evaluó Prieto. “El equipo determinó que en los estudios se discuten mucho los resultados, pero muy poco los métodos, y hay una dificultad en incorporar el sexo y el género en las publicaciones, en particular las de covid-19 y de las vacunas contra la covid-19”.

¿Qué sucede en Uruguay?

Los efectos secundarios comunes de las vacunas contra la covid-19 enumerados por la Unidad de Farmacovigilancia del Ministerio de Salud Pública (MSP) incluyen dolor en el brazo, fiebre, cefalea, fatiga y mialgia. No aparecen en la lista cambios en el ciclo menstrual. Fuentes del MSP afirmaron a la diaria que la Unidad de Farmacovigilancia no recibió reportes ni consultas al respecto.

En Uruguay no aparece como un tema de interés y no existe un registro ni ningún tipo de datos sobre vacunación y alteraciones en la menstruación. Rafael Aguirre, responsable del Área de Salud Sexual y Reproductiva del MSP, señaló a la diaria que no recibieron consultas de prestadores o equipos de salud por alteraciones en el ciclo menstrual en los meses posteriores a la vacunación contra la covid-19. En tanto, en la Comisión Nacional Asesora de Vacunas el tema “no se planteó”, dijeron integrantes de ese organismo a la diaria.

Por su parte, el presidente de la Sociedad de Ginecotocología del Uruguay (SGU), Claudio Sosa, dijo a la diaria que el impacto de las vacunas contra la covid-19 en la menstruación “no fue comentado”, pero reconoció la existencia de publicaciones científicas que verifican alteraciones en el ciclo menstrual luego de recibir la vacuna contra la covid-19, de transitar la enfermedad o por “efectos no covid” como la ansiedad. No obstante, señaló que aún hay “poca evidencia” y apuntó que quizás por ese motivo no lo han discutido en la SGU.

A diferencia de otros países, Uruguay no ha presentado sus datos de covid-19 discriminados por sexo ni por género, de acuerdo con información de la organización internacional Gendro, que promueve la incorporación de las dimensiones de sexo y género en la investigación científica y que desde la declaración de la pandemia ha recabado material de los países, desagregado según esas dos variables.

“Eso es una deficiencia”, señaló Prieto. Según consideró, “los datos de sexo dan la oportunidad de reducir efectos no deseados de las vacunas o adecuar las terapias de la enfermedad, y los datos de género dan la oportunidad de reducir desigualdades tanto en el cuidado de la salud como en el acceso a las vacunas y tener mejores políticas más dirigidas a las poblaciones que lo requieran”.

Artículo: “Menstrual changes after covid-19 vaccination”
Publicación: British Medical Journal (setiembre de 2021)
Autora: Victoria Male

Artículo: “Association Between Menstrual Cycle Length and Coronavirus Disease 2019 (covid-19) Vaccination”
Publicación: Obstetrics & Gynecology (enero de 2022)
Autores: Alison Edelman, Emily Boniface, Eleonora Benhar, Leo Han, Kristen Matteson, Carlotta Favaro, Jack Pearson, Blair Darney.