Hay clásico en Colombia: Uruguay-Brasil. El partido irá a las 22.30 en el estadio Hernán Ramírez Villegas, ubicado en la ciudad de Pereira, una región montañosa cafetera en el oeste colombiano. El árbitro será el argentino Facundo Tello, y sus asistentes serán sus compatriotas Julio Fernández y Cristian Navarro; el cuarto árbitro será el ecuatoriano Franklyn Congo. Los celestes, que siguen entrenando en Armenia, donde también jugarán con Bolivia y Perú, partirán este miércoles a Pereira, ciudad de la que los separan 40 kilómetros, que harán en ómnibus. Llegarán directamente a jugar el partido y luego volverán al hotel Palma Verde, donde están alojados.

Desde lo previo Brasil siempre es uno de los candidatos, quizá en casi todos los deportes en América, y en este caso no es la excepción. A pesar de eso, uruguayos y brasileños, que viven este partido como un clásico con condimentos distintos por lo que representa cada camiseta para uno y otro, llegan de una forma similar, ya que no jugaron del todo bien en su debut. Sin embargo, ambos ganaron 1-0 y son líderes, por lo que este partido es trascendente pensando en avanzar de fase.

En el equipo dirigido por Gustavo Ferreyra es clave mejorar la claridad y precisión en el ataque. Es cierto que Uruguay marcó bien en el partido con Paraguay, pero tuvo que aguantar y la pasó fea. Esta fortaleza es clave para un equipo como el brasileño, pero también es necesario atacar y generar situaciones de gol para ganar. Tras vencer a Paraguay, el DT celeste declaró: “Nos quedamos con la sensación de que podemos y debemos dar un poco más en cuanto al funcionamiento colectivo. Cuando transcurrió el partido el equipo mostró personalidad para no caer y para no recibir goles”. Ferreyra sabe que Brasil será distinto, difícil, más incisivo en el ataque, y es poco probable que vuelva a cometer los errores de la primera fecha y que falle en las situaciones de gol. Es probable que el entrenador celeste haga algunos cambios en la mitad de la cancha respecto del equipo de la fecha anterior, en la que Uruguay estuvo complicado.

Brasil llegó a Colombia entonado, con muy buen resultado en los amistosos previos. Entre los destacados del equipo aparece Reinier Jesus, la joya de Flamengo, que cumplió 18 hace dos días y acaba de ser anunciado como incorporación de Real Madrid, que adquirió su pase por 30 millones de euros. También están Pedrinho, de Corinthians, uno de los grandes jugadores de esta selección norteña, y Paulinho, de Bayer Leverkusen.

La selección brasileña busca llegar a Tokio 2020 con la chapa de ser el último campeón olímpico, título que obtuvo en Río de Janeiro 2016. Es dirigida por el gaúcho André Jardine, de 40 años, que tuvo experiencia en Inter, Grêmio y Sãn Paulo. Este equipo brasileño cuenta con seis futbolistas que juegan en el exterior, mientras que el resto proviene de equipos de Brasil.