Sin lugar a dudas lo que hizo Junior de Barranquilla en Montevideo fue imponer el prestigio que le han dado los años. Aunque los años por sí solos son apenas el prestigio de la vejez. Apenas el de la sabiduría. Sin embargo, el hecho de ser el Junior colombiano de por sí implica cierta presencia sobre los hechos. Sobre el otro. Sobre gramas más allá de fronteras. Por eso es que se impuso en Colonia.

Plaza Colonia, sin las mismas armas en la experiencia, carga, o mejor dicho cuenta internacional, con una historia de las bellas “mínimas”, a decir de Carlos Sorín, terminó involucrando a un pueblo entero. El peso de los años entre caravanas y desazones, entre bondis y rutas y un camino que va desde el ostracismo a las copas, como bien diría el relator más importante de su historia, Juan Prandi, a los oídos de Garra.

Así lo jugó Plaza y así lo jugó Junior. Quizás en esos detalles históricos estuvo la paridad en el juego. Plaza jugó sin vergüenza. Eso le supuso cierta liviandad. Con esa liviandad en el aire se debatieron sus zagueros con los nueves rivales. Así como se debaten en el pueblo la religión, los quesos, los adoquines. Con ese respeto se trataron en tierras cafeteras, equipos casi desconocidos. Si hasta lata se arrimaron.

En el segundo tiempo siguió pasando más o menos lo mismo, con la variable del tiempo, que es ineludible. Junior, haciendo uso de ese tiempo, por consiguiente, de la posibilidad de tener el balón. Así consiguió un cabezazo en el palo demasiado simbólico. Plaza siguió con lo suyo, a sabiendas de que en el pueblo ya se sabe de dónde y cómo vienen las cosas.

No le tuvo asco a la hazaña Plaza Colonia. Sí le tuvo miedo a la sorpresa el Junior cafetero. Así jugaron, con esas variables. Dejaron lo que trajeron. Lo que cargaron en la ida. Y fueron once y pico contra once y pico en el prado marcado.

Fue como escribir en el pergamino del cuadro otra página histórica. Aunque de la mano de la derrota. No siempre de la mano del olvido. Llevó al pueblo más allá de fronteras y hay un mérito insustituible en esa tenida. Aunque quedó afuera con el poderoso Junior, Plaza sigue hablando de procesos, de estabilidad, de crecimiento. En las pupilas deberían quedar esos colores esta noche.

Detalles

Estadio: Metropolitano Roberto Meléndez de Barranquilla.

Árbitros: Ángel Artiaga, Carlos López y Lubin Torrealba (terna de Venezuela).

Junior (0): Sebastián Viera, Marlon Piedrahíta, Daniel Rosero, Germán Mera, Gabriel Fuentes, Leonardo Pico (86′ Didier Moreno), James Sánchez, Luis González (86′ Sherman Cárdenas), Freddy Hinestroza (67′ Edwin Cetré), Teófilo Gutiérrez y Miguel Ángel Borja (67′ Carmelo Valencia).

Entrenador: Luis Amaranto Perea.

Plaza Colonia (0): Santiago Mele, Haibrany Ruiz Díaz, Mario Risso, Federico Pérez, Facundo Kidd, Ezequías Redín (82′ Diogo de Oliveira), Leonai Souza, Yvo Calleros, Facundo Píriz (66′ Juan Cruz Mascia), Leandro Suhr (86′ Nicolás Dibble), Agustín Miranda (46′ Ramiro Quintana).

Entrenador: Matías Rosa.