En su debut en el Mundial de Rusia, jugando en Moscú, la selección Uruguay de fútbol playa cayó 6-1 frente a Senegal.

Fue un partido muy complicado para los celestes, especialmente en el segundo y el tercer tiempo, en los cuales los africanos fueron muy superiores, con una gran condición técnica y física.

Uruguay había empezado ganando el partido antes del minuto, cuando una falta en el área restrictiva generó un penal que Nicolás Bella cambió por gol. El equipo de Germán Parrillo tuvo otro remate penal en el que se pudo haber puesto 2-0, pero ese fue el momento en que el arquero senegalés Al Seyni se reveló invencible. Un par de minutos después lo empató Mendy con un golazo y, a mitad del primer chico, Diatta, con un tiro libre de mitad de cancha. De ahí hasta el final Al Seyni estuvo espectacular tapando pelotas de gol uruguayas.

Lo peor vino en el segundo chico, cuando se pusieron con cierta comodidad 4-1, y Uruguay no le encontraba la vuelta.

En el tercero volvió a reaccionar el equipo uruguayo, pero un gol a segundos de empezado el último tercio, y otro ya sobre el final, hicieron imposible cualquier intento de achique celeste.

Uruguay y Senegal integran el grupo D junto a Omán y Portugal, campeón en 2015 y 2019, dos de las últimas tres ediciones del torneo.

El domingo a las 9.00 los celestes enfrentan a Omán con la obligación de buscar un triunfo que los deje en condiciones el martes de hacerles un gran partido a los campeones mundiales para tratar de clasificar a cuartos de final.