El remo ha dado un paso más en su enorme historia dentro del deporte nacional. Esta vez, de la mano del sorianense Felipe Klüver, quien disputó la final de la segunda etapa de la Copa del Mundo de remo en Poznan, Polonia, y logró la medalla de bronce en la categoría single ligero. Fue la primera vez que el remo uruguayo consiguió un logro de esta índole.
La carrera de Klüver fue impresionante. Durante buena parte de la competencia, el uruguayo se colocó entre el cuarto y quinto puesto. Pero, tal y como lo hizo junto a Bruno Cetraro en los Juegos Olímpicos de Tokio, en los últimos 500 metros su envión fue muy intenso, en varias remadas alcanzando la mayor velocidad de los seis corredores. Klüver logró un tiempo de 6:46.86 y solamente dos segundos y algunas centésimas lo separaron del irlandés Fintan McCarthy, que marcó 6.44.50 para lograr el segundo puesto; el oro se lo quedó el neozelandés Matthew Robert George, que alcanzó un tiempo de 6.43.07.
“Un momento único en el que te das cuenta de que vas por buen camino. Esto significa todas las horas que se dedica a disfrutar haciendo lo que a uno le gusta día a día, siempre buscando ser el mejor, buscando siempre ganar”, publicó Klüver en sus redes sociales tras el logro.
Para acceder a la final, el uruguayo participó en la serie uno y quedó cuarto con un tiempo de 7:12.04. Fue al repechaje y se quedó con la victoria con 7:02.00 y, por ende, se metió en semifinales, donde también obtuvo el tercer lugar para entrar en la histórica final.
Bruno Cetraro ganó la final B
Hubo más participaciones celestes en Poznan. Bruno Cetraro lo hizo en la misma categoría que su compañero olímpico, mientras que Leandro Rodas y Martín Zócalo lo hicieron en categoría dos sin timonel.
Cetraro compitió en semifinales del single ligero, pero no pudo quedar entre las seis embarcaciones que corrieron la final. Como es clásico en este deporte, las embarcaciones del séptimo al duodécimo compitieron en la final B, que quedó para el uruguayo gracias al tiempo de 6:51.90.
Rodas y Zócalo, en el dos sin timonel, fue el otro bote celeste que compitió en la copa del mundo. En el debut finalizaron cuartos en su serie inicial con 6:44.41 y en el repechaje –donde había tres cupos a las semifinales en juego– terminaron terceros con 6:40.48. Corriendo la final B de la categoría, los uruguayos terminaron en el último lugar, entre los 12 mejores de la disciplina.