“Somos Uruguay y no podemos escapar a nuestra idiosincrasia, tenemos la fuerza, la energía y las ganas para poner un bote femenino por primera vez en la historia en un campeonato que es el más participado de la historia”, sostuvo el entrenador del dúo, Osvaldo Borchi.

Todo comenzó con una idea. Borchi, entrenador del dúo de la categoría sin timonel en peso ligero, se convenció de que su bote tenía la capacidad de llegar muy lejos en esta competencia.

“Tuve la idea de que con dos chicas de peso ligero podríamos hacer un bote que tuviera posibilidad de acceder a una final de un campeonato sub 23”, dijo el entrenador a la diaria.

Primero entrenaron en twin y desde hace dos meses practican en swing. Durante el proceso de preparación tuvieron que atravesar algunos obstáculos, como la lesión de Tatiana, que tuvo un problema en uno de sus brazos, y que fue sustituida por Romina Cetraro, que no es sub 23, pero la reemplazó mientras se rehabilitaba.

“A pesar de eso fue un bote que desde el principio me parecía que tenía la posibilidad de llegar a una final del mundo. Yo hablé claro con ellas y les dije que tenía ese pensamiento, y que confiaba muchísimo en el dúo porque veía potencial para llegar a la final”, confesó Borchi.

El fuerte de las uruguayas es que se complementan perfectamente: el dúo se compone por una chica muy potente, Paulina Centurión, “que es la numero 1 y tiene una energía impresionante”, explicó, y Tatiana Cejas, que viene de ser oro panamericano en Cali acompañada por Zoe Acosta, Cloe Callorda y Romina Cetraro, es la que va delante, lleva el ritmo, tiene un swing y “rema técnicamente muy bien”, sostuvo.

En esta categoría el requisito es un peso promedio de 59 kilos como máximo, es decir que una de las integrantes puede pesar 59 y la otra 55, según el resultado de la balanza de dos a una hora antes que comience la regata.

“El camino no fue fácil, pero cuando algo se interponía yo les repetía que ellas tenían la posibilidad de llegar a una final del mundo y que ellas podían ser las primeras uruguayas, les fui metiendo esa idea”, agregó.

En las semifinales que se disputaron este martes las charrúas llegaron en segundo lugar y accedieron a la final porque clasificaban las dos primeras, venciendo a nada más y nada menos que a las australianas. Además de la clasificación en sí, se destaca el hecho de haber superado a un equipo tan grande como Australia.

“Pudimos vencer a Australia, con el poderío que tiene, sus técnicos, sus científicos, su tecnología, gracias a la técnica, la calidad y el esfuerzo de las chicas; veníamos primeras hasta los últimos metros, y ya cuando estaba decidida la clasificación, porque clasificaban las dos primeras, fue todo alegría”, contó Borchi.

Ahora el equipo se entrena para la final, buscando quedar lo más adelante posible. “Las regatas hay que correrlas, una regata nunca es igual a la otra, pero estamos en la final y tenemos que buscar pelear con todas. Hay mucha fe y muchas ganas, y nos vamos a seguir demostrando a nosotros mismos que podemos”, expresó.

La clave para obtener este resultado histórico fue muy simple: “Se trató de trabajo y más trabajo, horas de sacrificio, más de dos meses fuera de casa; estas chicas viven en un departamento donde se cocinan y se manejan entre ellas”, comentó.

Y destacó el apoyo de la Federación, que a su entender fue fundamental para obtener este logro; también a la gente de Galicia, donde el equipo está entrenando, que están siempre a disposición para colaborar con lo que el equipo necesite.

Este mundial es el campeonato más concurrido de la historia: son más de 1.600 los atletas participantes, hay más de 3.000 acreditaciones dando vuelta en un campo de regata.

“Es algo infernal, en la mañana se trancan los muelles para poder llegar, porque no se puede salir a remar de la cantidad de botes que hay, es algo espectacular. En ese contexto viene Uruguay y se clasifica para una final del mundo. Ahora a esperar al viernes y tratar de buscar lo más adelante posible, hay que disfrutarlo”, finalizó el entrenador.

Los uruguayos

Es la primera vez que una delegación tan grande de Uruguay participa en un Mundial: son 14 deportistas, siete mujeres y siete hombres.

En single sub 23 participan Luciano García, que avanzó a semifinales del single peso abierto; quedando detrás del búlgaro Emil Neykov (6:64.16), obtuvo uno de los cuatro pasajes en juego para los cuartos de final que se disputan este miércoles.

En single ligero sub 23 está Felipe Klüver, que avanzó a las semifinales del single peso ligero que se disputan este jueves, tras debutar con una gran labor en el single ligero donde terminó primero en la cuarta serie con 7:00.31, mejor posicionado que Argentina, Canadá, España e Israel.

En single femenino peso ligero sub 23 compite Nicole Yarzon, que finalizó quinta en su serie (8:04.80) y pasó al repechaje, que fue el martes, donde quedó cuarta, logrando el pasaje a las semifinales C y D, es decir por posiciones finales del lugar 13 al 24.

Por otra parte, Eric Seawright y Joaquín Vázquez terminaron cuartos en su serie y pasaron al repechaje de este miércoles, donde buscarán uno de los tres lugares en pugna para las semifinales en el doble par sub 23.

Ynela Aires, Cloe Callorda, Yuliana Etchevarne y Zoe Acosta fueron quintas en el cuatro sin timonel y también estarán en el repechaje de este miércoles.