El Ministerio de Salud Pública (MSP) elaboró un protocolo para que los prestadores de salud informen sobre los efectos secundarios adversos detectados en las personas que reciban las vacunas contra el coronavirus. Las autoridades explicaron que algunas de las complicaciones que se puede sufrir tras ser inoculado son: fiebre, dolor de cabeza, diarrea, mareos, náuseas y pérdida de la capacidad para no ir a reuniones sociales con la excusa de que estamos en plena pandemia. “Vamos a trabajar para que la mayor cantidad de gente posible se vacune, pero no podemos engañar a la ciudadanía. Las personas tienen derecho a saber que, una vez recibida la segunda dosis, ya no tendrán pretextos para faltar a las reuniones de exalumnos del colegio o del liceo, evitar las visitas a sus familiares ancianos o quedarse en casa mirando series en Netflix en lugar de salir a tomar algo con los amigos”.

Desde el MSP reconocen que este efecto adverso “es de los que más nos preocupan, porque puede ser un desestímulo muy grande para vacunarse. La gente lleva más de un año usando la excusa de la pandemia para no ir a donde no tiene ganas. Pero tenemos la obligación moral de decir la verdad”. De todas maneras, desde la cartera indicaron que este efecto secundario adverso “aparecerá en el consentimiento que se debe firmar para recibir la vacuna, pero en letra muy chiquita. Está bien ser honesto, pero tampoco hay que regalarse así”.