Una de las características principales del discurso de la mayoría de los dirigentes de la “coalición multicolor” es el pasaje de facturas permanente al Frente Amplio (FA), a los sindicatos, al feminismo y a los colectivos LGBT. Esto es algo aceptado por los propios dirigentes, que responsabilizan a la izquierda por el hecho de que desde el oficialismo se responsabilice de todo a la izquierda. “Si ellos no hubieran dejado el país en ruinas, nosotros no les estaríamos echando la culpa de todo y no daría la impresión de que usamos a la izquierda para tapar nuestros errores. Yo creo que desde el principio se trató de un plan para dejarnos a nosotros como gente que no se hace cargo de la situación. Empezaron a ejecutarlo ni bien llegaron al poder en 2005”, consideró un dirigente del Partido Colorado.

Por otra parte, un diputado nacionalista aseguró: “Es cierto que ante cualquier problema responsabilizamos al Frente Amplio y a los sindicatos, pero es parte del desastre que hicieron ellos. Dejaron un país muy polarizado, con una grieta muy grande, y por eso a nosotros sólo se nos ocurre acusarlos cada vez que nos acusan de algo a nosotros”. El legislador coincidió con el dirigente colorado que esto podría ser parte de un plan deliberado del FA. “Ellos son así, resentidos. No pueden soportar la idea de que nos hagamos cargo, así que nos fuerzan a echarles la culpa a ellos. Son de lo peor”.