El cardenal Daniel Sturla había estado en contacto con un portador de coronavirus el lunes 17, y a pesar de que los test rápidos que se hizo en ese momento dieron negativo, debía guardar cuarentena hasta el lunes 24 por lo menos, ya que ese día iba a recibir el resultado de un segundo test. Pero a pesar de eso, el domingo 23 Sturla participó en el cortejo fúnebre de Jorge Larrañaga, y al otro día se enteró de que era covid positivo. El cardenal pidió perdón por sus acciones y ayer aclaró que está respetando “a rajatabla” los protocolos para las personas infectadas. “Anoche mismo, luego de azotarme para expiar los graves pecados que cometí, limpié con alcohol en gel el látigo utilizado, porque no quiero que alguien más lo agarre y se contagie de coronavirus”, tuiteó Sturla.

En otro tuit, el religioso explicó que “la redención no consiste solamente en pedir perdón. La auténtica redención se obtiene cuando cambiamos nuestro comportamiento. Hoy no sólo soy una persona obediente de la voluntad de nuestro Señor, sino también de la voluntad del señor ministro de Salud Pública, Daniel Salinas”.

En un nuevo mensaje Sturla aclaró que no sabe si va a lograr su absolución con estos cambios de hábitos, por lo que comenzó la búsqueda de un apartamento de dos dormitorios para alquilar en el infierno. “Yo espero no terminar ahí por esta pavada, pero supongo que depende de si termino contagiando gente. Así que si alguien tiene algún dato sobre un apartamentito allá abajo, lo agradezco”.