La recuperación económica tras la crisis generada por la pandemia trajo algunos problemas que nadie había previsto, entre los que se encuentran la falta de contenedores para mover mercaderías a nivel global. En Uruguay este problema afecta especialmente a la industria cárnica, que tiene stock y clientes pero no puede enviar su mercadería. Pero además de eso, la falta de contenedores está dejando a los productores ganaderos sin lugar para guardar los cuantiosos ingresos que están teniendo debido al alza en las exportaciones. “La situación hoy por hoy es dramática, porque estamos exportando a niveles que no sólo son altos comparados con el año pasado, sino también comparados con la etapa prepandemia. El único recipiente que nos permite almacenar esa cantidad de dinero es un contenedor. Si esto sigue así, vamos a tener que empezar a faenar menos. Las vacas se pueden quedar en el campo sin mayores problemas, pero los billetes no”, explicó un estanciero.

Limitar las exportaciones de carne no sólo serviría para aumentar la disponibilidad de contenedores, sino también para facturar menos dinero, algo que los productores ven como “positivo en cierto sentido”. “Tal como están las cosas, ganar aún más dinero del que estamos ganando puede ser un problema, porque es cada vez más difícil justificar que no nos pongan impuestos. Y ganar más dinero para que este termine en manos de los pobres no nos gusta”, explicó el estanciero consultado.