El Ministerio del Interior anunció el lunes la incautación de 409 kilos de pasta base de cocaína, la mayor cantidad de esta sustancia que haya sido incautada en Uruguay. El operativo permitió atrapar al cabecilla de la banda de narcotraficantes, un hombre que, según el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, llevaba una vida de lujo “camuflado” en el barrio privado La Tahona. Fuentes policiales explicaron que este narcotraficante “vivía escondido bajo la apariencia de un estafador, algo que le permitía no despertar sospechas en un lugar con tantos empresarios de buen pasar”.

Varios vecinos del barrio privado coinciden en que el disfraz de este delincuente era muy eficaz y en ningún momento sospecharon que pudiera tratarse de una fachada. “Cuando uno le preguntaba a qué se dedicaba, él contestaba con evasivas, sin dar muchos detalles que permitieran identificar en qué negocios estaba metido. Es decir, un vecino común y corriente de acá. Se ve que estudió mucho tiempo su personaje”, declaró un habitante de La Tahona.

Otro vecino contó que cuando la Policía vino a buscar a esta persona “jamás me imaginé que podía ser por algo relacionado al narcotráfico. Pensé que lo habían atrapado en alguna maniobra de evasión fiscal, que es algo muy común acá. De hecho, pensé en ofrecerme para regar las plantas de su casa hasta que le dieran prisión domiciliaria, más o menos dentro de un mes. Pero aparentemente va a pasar más tiempo en la cárcel que la gente común y corriente de acá”.