La reunión de Ciudadanos en donde se iba a analizar el futuro de la subsecretaria Carolina Ache tras conocerse los mensajes que intercambió con su par del Ministerio del Interior, Guillermo Marciel, finalmente no se concretó, ya que la propia implicada presentó su renuncia. El presidente Luis Lacalle Pou confirmó ayer que aceptó la dimisión, al tiempo que hizo una exhortación. “Ya está, ya tienen su renuncia. Ahora les voy a pedir por favor que durante los próximos tres escándalos no me pidan más renuncias, porque si voy a dejar ir a alguien cada vez que aparece algo turbio relacionado con el gobierno, me quedo sin gente”.
Fuentes de la coalición gobernante creen que la renuncia de Ache fue “una victoria para los intentos desestabilizadores del Frente Amplio, que tiene un escasísimo, por no decir nulo apego a la democracia”. En ese sentido consideraron que “lo único que nos puede salvar de esta embestida antiinstitucional es una vuelta de los milicos”.
El sustituto: según pudo saberse, Lacalle Pou le solicitó a Ciudadanos que el sucesor de Ache sea “un sanguinettista de los viejos, esos que se aferran a un cargo con uñas y dientes”.