A pocas horas de suspender la importación de petróleo y gas proveniente de Rusia, el presidente de Estados Unidos anunció el comienzo de un plan para flexibilizar las sanciones al gobierno de Vladimir Putin. Desde la Casa Blanca explicaron que “si bien Estados Unidos tiene profundas discrepancias con el gobierno de Putin, la realidad indica que cuando lancemos la invasión a Venezuela para llevar la paz y la democracia a ese país vamos a necesitar el petróleo ruso”. Las relaciones entre Caracas y Washington estaban pasando por un buen momento hasta ayer de tarde, gracias al acercamiento impulsado desde la Casa Blanca para conseguir el petróleo que necesita para cubrir la falta de suministro desde Rusia. Sin embargo, en un par de horas la situación cambió radicalmente. Según un analista internacional de la cadena CNN, “la estrategia de Biden consiste en estar siempre un paso adelante en materia geopolítica. Ni bien termine la invasión a Venezuela, su próximo paso seguramente sea formar una alianza con Putin y Nicolás Maduro para enfrentar a Irán, para luego incluir a este país en una alianza contra Corea del Norte”.

La frase: “En este preciso momento no me puedo acordar de si los talibanes son buenos o malos”. Joe Biden.