Un observatorio en Estados Unidos registró un evento astronómico “inédito y asombroso” que podría cambiar para siempre la forma en que analizamos los fenómenos astronómicos. Un meteorito que se dirigía hacia la Tierra e iba a colisionar con el planeta dentro de diez años cambió sorprendentemente de rumbo. Los astrónomos creen que el cuerpo celeste “se dio cuenta de que acabar con la Tierra era hacernos un favor, y eso es algo que los humanos definitivamente no nos merecemos”.

Según explicó un experto en asteroides, estos reciben las ondas de las transmisiones televisivas y de internet de la Tierra, por lo que están “bastante al tanto de las cosas que pasan acá, como las hambrunas, las guerras, las crisis climáticas y cosas por el estilo”.

Hasta la fecha se creía que la gravedad era la única fuerza que condicionaba las trayectorias de los asteroides, por lo que el descubrimiento de que la mezcla de lástima con odio también tiene efectos sobre el movimiento de estos cuerpos celestes es considerado “revolucionario”.

La frase: “Creemos que un extraterrestre actuaría igual, así que estamos a salvo de casi todo”. Un científico.