En la sede del Partido Colorado (PC) se festejó por partida doble el domingo de noche. Por un lado, se mantuvo la LUC. Pero además es la primera jornada electoral en muchos años que no trae consigo malas noticias para la colectividad política. “Por más que sabíamos que solamente había dos resultados posibles, se sentía muy raro eso de no terminar la jornada completamente deprimidos o con sensaciones encontradas por un triunfo de la derecha que no se podía festejar con mucha alegría porque venía acompañado de una nueva votación humillante de los colorados”, explicó un dirigente del PC que estaba en la sede partidaria.

“En el caso del triunfo de [Luis] Lacalle Pou en el balotaje no hubo un dato humillante, pero eso de estar festejando el triunfo de un blanco era humillante. Esta vez no pasó nada de eso”. Los colorados están considerando la posibilidad de impulsar nuevos referéndums. “Para levantar la moral del partido necesitamos más noches como esta. Porque aún con un resultado negativo para la coalición de gobierno estaríamos compartiendo una derrota con el resto de los partidos, así que sería una derrota con sabor a victoria”, declaró el dirigente consultado.

La frase: “El resultado del referéndum demuestra que el Partido Colorado está más vivo que nunca y que yo tengo cuerda para rato”. Julio María Sanguinetti.