En el marco de la lucha para contener el aumento de precios de productos de primera necesidad, el gobierno decidió exonerar del pago de IVA a los panificados y los fideos. Si bien desde el gobierno afirman que los productos exonerados de impuestos serán los mismos que se comercializan ahora, fuentes de las cámaras empresariales reconocieron que pueden registrarse “pequeños cambios”. “En el caso de los tallarines, por ejemplo, van a venir con una tira de grasa lateral que puede llegar a ser tres o cuatro veces más grande que el propio tallarín. Y las moñitas van a tener hueso en el medio, que obviamente no es muy nutritivo ni te saca el hambre, pero va a ser muy rico para chupar”.

Las fuentes aclararon que no todos los fideos pasarán a tener grandes cantidades de grasa y huesos. “La pasta común y corriente, la que se comió toda la vida, va a seguir viniendo como siempre. Eso sí, no van a tener el descuento del IVA. O sea que las personas de mayor poder adquisitivo no van a tener que pelear contra la grasa y los huesos. Pero bueno, eso forma parte de las diferencias naturales que hay entre los seres humanos. Es saludable para el progreso de la sociedad”.

La frase: “Queremos aliviar un poco a los que menos tienen, porque tampoco queremos terminar como en la Revolución francesa”. Luis Lacalle Pou.