A medida que la ofensiva rusa en Ucrania se intensifica, crecen en Europa las voces que piden mayores sanciones al gobierno de Vladimir Putin. Alemania, uno de los principales compradores de petróleo y gas natural rusos, anunció que se sumará a un embargo contra el gobierno de Putin, aunque aclaró que lo hará “mientras dure el calorcito”. “Según nuestras predicciones meteorológicas, vamos a tener un lindo verano y unas primeras semanas de otoño también bastante cálidas. Estimamos que los paseos en bicicleta, las cenas frías y dormir con la ventana abierta van a ser actividades bastante frecuentes. O sea que perfectamente podemos prescindir del petróleo y el gas rusos en ese tiempo”, declaró el canciller alemán, Olaf Scholz.

Pero el mandatario advirtió a sus socios europeos que de aquí a mediados del otoño la situación en Ucrania tendría que estar “completamente controlada”. “Hagan lo que quieran. Intervengan en Ucrania, invadan Rusia, maten a Putin, lo que sea, pero Alemania es un lugar muy frío en invierno. No podemos calefaccionarnos con discursos bonitos sobre lo linda que es la paz entre las naciones”.

La campaña: el gobierno alemán pide a su ciudadanos que sean “solidarios con Ucrania” y eviten usar el auto en viajes menores a tres cuadras.