Si bien desde la Intendencia de Montevideo se le bajó el pulgar a la isla artificial que un conglomerado privado planea construir frente a Punta Gorda, en el gobierno consideran que el proyecto aún es viable. “No hay que olvidar que se trata de una isla que iría en el mar, que no es jurisdicción de la Intendencia, sino del gobierno nacional. Ojalá que podamos entendernos con la Intendencia, pero si no, la Armada Nacional está a las órdenes para proteger la construcción de la isla”, explicaron desde la Torre Ejecutiva.

Mientras tanto, el conglomerado empresarial dio más detalles de su proyecto. Una de las innovaciones más destacadas es la presencia de cocodrilos en el agua que circunda la isla, que se encargarán de mantener alejados a los pobres. “Obviamente que la seguridad es uno de los principales atractivos para mudarse a una isla. Al ser el acceso exclusivamente por un puente, es más fácil controlar. Pero sabemos que la situación en materia de seguridad es complicada, así que además vamos a agregar a los cocodrilos, que van a mantener alejados a los pobres que quieran cruzar nadando. Si en la Edad Media les funcionó, a nosotros también nos tiene que funcionar”, explicaron los responsables de la isla artificial.

Recursos humanos: del cuidado de la isla artificial se encargarán porteros, limpiadoras, jardineros, un cuerpo policial propio, un ejército y un gobernador que responde a la asamblea de copropietarios.