“Si al final del período los uruguayos son más libres, habremos hecho bien las cosas”, dijo Luis Lacalle Pou ante el Parlamento el primero de marzo de 2020. Entre los defensores del mandatario hay quienes opinan que está actuando de acuerdo a esta premisa, pero otros opinan que en algunos sectores, como el del tránsito, ese aumento de la libertad no llegó. “Hace más de dos años que no nos gobierna el Frente Amplio, pero el exceso de regulación en el tránsito nos sigue asfixiando. Hoy por hoy, manejar por cualquier ciudad uruguaya no es diferente a hacerlo en Cuba o Corea del Norte”, se quejaba un intelectual libertario en las redes sociales. Pero esta situación podría cambiar en los próximos meses, ya que desde el gobierno se pretende flexibilizar el uso de la luz roja del semáforo. Una fuente de Torre Ejecutiva consideró que en la actualidad hay “un exceso de luces rojas en los semáforos. Todos, absolutamente todos los semáforos del país tienen luces rojas. Y ojo, no es que nosotros no estemos de acuerdo con que exista la luz roja del semáforo. Al contrario, estamos muy de acuerdo. Por eso lo que proponemos es sacar la luz roja en apenas el diez por ciento de los semáforos. Es decir que nueve de cada diez semáforos seguirán funcionando como siempre, mientras que en el restante se apostará a la libertad responsable de los conductores”.

Cambios en la señalización: los carteles con la leyenda de “pare” pasarán a llevar escrita la frase “no deje que el Estado le diga lo que tiene que hacer”.