A las 20.17 de ayer la NASA hizo impactar deliberadamente una aeronave contra el asteroide Dimorphos como parte de un experimento que busca desarrollar métodos para desviar asteroides. El objetivo es tener las herramientas suficientes para cambiar el rumbo de un objeto celeste que eventualmente pudiera ser un peligro para la Tierra. Una vez culminada la misión, la NASA lanzó otra similar, pero en este caso busca desviar un asteroide cualquiera para que impacte en la Tierra. “La misión que acaba de terminar nos va a dar mucha información que nos va a ser de gran ayuda para la próxima misión, que es la que realmente nos importa. Se trata de desviar un asteroide que se esté dirigiendo a cualquier otro punto del sistema solar para que termine impactando en la Tierra y acabando con toda esta locura de violencia y contaminación que llamamos ‘civilización humana’”, explicó un científico de la NASA. El nombre de la misión es Operación Eutanasia, y su objetivo final es provocar un nuevo apocalipsis, similar al que acabó con los dinosaurios, para que también la raza humana desaparezca y emerja dentro de cientos de millones de años una nueva civilización de terrícolas a los que les vaya mejor que a los actuales.

El riesgo: para la NASA el principal obstáculo para esta misión sería que a los rusos se les ocurra querer salvar al planeta, de puro contras.