El llamado a sala del ministro del Interior, Luis Alberto Heber, promovido por el propio oficialismo, no sirvió para desactivar la interpelación anunciada por la oposición. Pero ayer, luego de asistir al Parlamento, Heber hizo unas declaraciones que podrían cumplir este objetivo. “Si quieren votar una interpelación, que lo hagan, pero yo no voy a ir. Y no es por falta de ganas. Simple y sencillamente no tengo tiempo, porque me paso todo el tiempo yendo a juzgados por los numerosos casos que me involucran”, declaró el jerarca.

“Nos cagó”, fue la respuesta del Frente Amplio al anuncio. En efecto, desde la oposición consideran que “el argumento de Heber es contundente, demoledor, lapidario. La verdad es que ninguna persona que se pase la vida en los juzgados, como es su caso, tendría tiempo para asistir a una interpelación parlamentaria. Desgraciadamente vamos a tener que retirar el pedido de interpelación”, anunció un legislador frentista.

La queja: “Con tantas convocatorias a los juzgados no me queda tiempo ni para presionar públicamente a la Justicia”. Luis Alberto Heber, inquilino del Poder Judicial.