A pesar de que la aprobación de la norma que regula el financiamiento de los partidos políticos ya tiene los votos necesarios para su aprobación, debido al apoyo de frenteamplistas y colorados, desde el Partido Nacional aún existen reparos. Pero no sólo los nacionalistas ven con recelo la iniciativa. La Cámara Uruguaya de Fabricantes de Chicles también consideró que la ley “restringe libertades fundamentales”. “Los fabricantes de chicles tenemos derecho a hacer donaciones a los partidos que nos plazca sin que se nos ande importunando con pesquisas más propias de un Estado policial que de una democracia”, declaró un representante de la gremial.
También llegaron críticas desde la Federación de Emprendedores de Bolivia. “Esta ley lo que trae es más burocracia, porque las vueltas que tenemos que dar para apoyar partidos uruguayos ya son bastante complejas. Si nos la complican más, al final va a pasar lo de siempre: el peso de la burocracia va a terminar aplastando al emprendedurismo”.
La advertencia: “Si sale esta ley y se restringe el apoyo que los medios le pueden dar a un partido, vamos a pedir que los canales privados nos devuelvan todo el dinero que les regalamos”. Jerarca de la Torre Ejecutiva al que no le gusta tirar el dinero.