La situación en Ucrania está estancada desde hace varios meses, ya que las tropas rusas no han registrado grandes avances, pero tampoco han retrocedido. Pero en medio de este panorama desolador, un principio de solución a la crisis parece asomar en el horizonte. “Nuestro razonamiento en Bruselas es el siguiente: ya que Putin necesita invadir un país para mantenerse en el poder y nosotros necesitamos deshacernos de Hungría, ¿por qué no le pedimos a él que deje de atacar a Zelenski y empiece a atacar a Orbán? Sería una ganancia para ambas partes”, explicó una fuente de la diplomacia europea. Esta estrategia para deshacerse del presidente húngaro, quien desde hace unos años se ha convertido en un permanente dolor de cabeza para la Unión Europea, se enfrentaría al problema de la afinidad entre él y Putin. De todas maneras, en Bruselas consideran que “con una promesa de comprar más petróleo y gas a Rusia y liberar activos congelados seguro que logramos convencerlo”.

La queja: “¿Por qué deberíamos seguir apoyando a Ucrania? ¿Nosotros tenemos algo que ver con esa guerra? ¿Acaso fuimos nosotros quienes convencimos a los ucranianos de seguir provocando a Putin?”. Legislador estadounidense amante de las preguntas retóricas.