El mandatario parte hoy en viaje hacia la Base Artigas, en compañía de sus tres hijos, el ministro de Defensa Nacional, Javier García, y altos mandos de las Fuerzas Armadas. Según explicaron desde la Torre Ejecutiva, el objetivo de Lacalle Pou es “ir buscando un lugar para quedarse entre 2025, luego de entregar el mando, hasta 2029, cuando empiece la campaña electoral para las próximas elecciones”.

La estrategia del mandatario de “alejarse de los reflectores” durante algunos años, mientras planea su regreso, estaba decidida desde hace años, pero algunos episodios ocurridos en los últimos dos años lo llevaron a cambiar la sede del retiro. “Inicialmente la idea del presidente era irse a La Tahona o a La Paloma. Pero después vinieron los escándalos de Astesiano, Marset y Penadés, y entonces le pareció que había que irse a un lugar bastante más alejado. Esperemos que no estalle ningún otro escándalo, porque en ese caso no habría más remedio que irse a otro planeta”.

¿Criogenia? El mandatario estaría considerando también la posibilidad de congelarse y volver al país cuando las palabras Astesiano, Marset y Penadés sean recordadas solamente por los ancianos.